Pablo Simonetti, vecino del barrio Falucho 53, escribió a eleco.com.ar para expresar su descontento frente a la falta de recolección de residuos en el lugar desde hace más de una semana. Esto causó que el canasto ubicado en Basílico y Beiró desbordara y provocara malestar en los vecinos por el olor nauseabundo que desprende el basurín colapsado.
Además, están preocupados por el foco infeccioso que significa la acumulación y descomposición de los residuos, ya que avistaron la presencia de ratas en el lugar.
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