Los vecinos de Almirante Brown están hartos de EDESUR

Los vecinos de Almirante Brown están hartos de EDESUR

La prestadora de servicios eléctricos de zona sur volvió a hacerles pasar un día infernal a miles de vecinos de Almirante Brown (y de toda la región). Las movilizaciones y cortes de calles comenzaron a hacerse sentir desde el domingo.

Una verdadera pesadilla están viviendo los vecinos de Almirante Brown, gracias al pésimo servicio brindado por EDESUR en el distrito. Y lo peor es que nadie parece reaccionar en defensa de los usuarios, como si una ola de adormecimiento gubernamental provocará sordera ante la grave situación eléctrica en el Conurbano. 

Ayer miles de hogares y comercios sufrieron durante muchas horas la inclemencia de la empresa. Oficialmente fueron más de 3800 usuarios de Adrogué Centro y Burzaco Centro que estuvieron sin servicio. Pero, esos son los datos que brinda el Ente Regulador (ENRE), entidad acusada por muchas de voces de estar en contubernio, por acción o omisión, con las prestadoras eléctricas.

Las redes sociales marcan un mapa mucho más amplio de cortes y problemas. En el Barrio Corimayo y El Vapor, más alejados del Centro de Burzaco, sufrieron más de 24 horas sin servicio. Una "pavada", al lado de lo que sucedió en varios barrios de Glew y Longchamps, que estuvieron desde el día miércoles 15 sin servicio, hecho que motivó corte de rutas con quema de neumáticos. 

En José Mármol, estuvieron sin servicio desde el Lunes a la madrugada, y también se hicieron presentes cortes de calles y protestas, con epicentro en Blasco Ibáñez 700 entre Bynnon y Nother, donde hubo quema de gomas y reclamos de presencia de autoridades de la empresa. 

Por supuesto, la respuesta de la empresa es siempre la misma: "aumento de temperatura y sobrecarga de las redes". Pero, la realidad es que las obras nunca se cumplieron, los cables tienen más de 30 años y los aumentos son cada vez más demenciales. Y esto se repite en todo el Conurbano Sur. Ayer fueron 130 mil usuarios los que "oficialmente" sufrieron cortes, pero se sabe que son muchos más y que el ENRE no los impacta en el sistema.

El Gobierno Nacional quién debería accionar duramente contra la empresa, no tiene vocación política de aplicar multas o rescindir contratos, solo de aumentarle subsidios, licuar sus deudas y autorizar aumentos exorbitantes. Provincia, más allá de la buena intención, se mantiene expectante haciendo su propio juego, ni de Dios, ni del diablo y los intendentes, que deberían canalizar todo este conflicto, ya que son los principales perjudicados, demoran, se burocratizan, cuando ya deberían haber tomado otra actitud. 

¿No es hora de que los municipios judicialicen en bloque a la empresa? Recuerden que la zona sur tiene casi 3 millones de vecinos. Es un gran número en el cual apoyarse. 

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