La Argentina ya tiene nuevo embajador en el Vaticano. Ayer, el papa Francisco recibió las cartas credenciales de Eduardo Valdés, quien reemplazará a Juan Pablo Cafiero en la Santa Sede, considerada estratégica para el país desde la llegada de Bergoglio. "Mi objetivo es mantener el nivel de relación alto que la Argentina tiene con el Vaticano", sostuvo el diplomático.

Luego de la ceremonia, que se llevó a cabo en la Biblioteca Vaticana del Palacio Apostólico, el ex jefe de gabinete de Rafael Bielsa transmitió al Papa la invitación de la presidenta Cristina Kirchner para visitar la Argentina y afirmó que el Sumo Pontífice "la tendrá como prioridad" para finales de 2015 o 2016. "Voy a trabajar para intentar confirmar que el Papa visite la Argentina en 2016 y darles esa alegría a todos los argentinos", subrayó.

Valdés consideró: "Nunca hubo una relación tan óptima e inmejorable entre la jefa del Estado argentino y el Papa". Y reveló que él tiene como iniciativa propia intentar que Francisco se encuentre en el Vaticano con Cristina Kirchner y su par chilena Michelle Bachelet para conmemorar los 30 años de la mediación papal que evitó la guerra entre los dos países por el diferendo limítrofe por el canal de Beagle.

En un comunicado, Valdés indicó que Francisco envió "un especial saludo" a la Presidenta y "su bendición a todo el pueblo argentino". Además, aseguró que el Papa hizo "mención especial" al flamante secretario de Inteligencia de la Nación, Oscar Parrilli, a quien deseó "lo mejor en sus nuevas funciones" y, según escribió, le aseguró "que reza por él".

El flamante embajador estuvo acompañado por su familia, además de los tres hijos de Alicia Oliveira, ex defensora del Pueblo de la ciudad de Buenos Aires y amiga del Sumo Pontífice, y del presidente de la Cámara de Diputados y enviado especial de la Presidenta, Julián Domínguez, quien se había reunido con el Pontífice anteayer.

El diputado del Frente para la Victoria manifestó a Francisco "la altísima valoración y satisfacción" de la Presidenta por su mediación entre Estados Unidos y Cuba en el acuerdo histórico para retomar el diálogo diplomático tras 53 años. "Francisco levanta puentes y derriba muros", destacó.

En este sentido, el precandidato presidencial consideró que "la gestión del Papa ha permitido la humanización de las relaciones diplomáticas, el bloqueo era absolutamente desproporcionado e inhumano".

Cristina Kirchner designó a Valdés a principios de octubre, y el Vaticano le otorgó el plácet de estilo correspondiente en rápido trámite.

De la ceremonia participaron monseñor Guillermo Karcher, ceremoniero pontificio; monseñor Fabián Pedacchio, secretario privado de Su Santidad; monseñor Avelino Betancourt, jefe de Protocolo del Vaticano, y monseñor Guiseppe Laterza, oficial de la Secretaría de Estado. También estuvieron el embajador argentino en Italia, Torcuato Di Tella; el agregado comercial de la sede diplomática, Guillermo Moreno; el empresario Eduardo Eurnekian; el ex secretario de Medios Enrique "Pepe" Albistur; el defensor del Pueblo de la ciudad de Buenos Aires, Alejandro Amor.