Urtubey, con la cabeza en otra parte

Urtubey, con la cabeza en otra parte

El escándalo de Parque La Vega, la conmoción en Coronel Moldes y la identificación del concejal oficialista Mauricio Gerónimo son los indicios de problemas graves, generados en los últimos años; estallan cuando el tercer mandato de Juan Manuel Urtubey transita recién su décima semana y quedan por delante 45 meses y medio de gobernación.

Los tres episodios mencionados son la cabeza del iceberg del perfil que ha impreso a la provincia un estilo de gobierno y una práctica política que son propios de Urtubey aunque remedan, a medias, al kirchnerismo.

Hay que tener en cuenta, en este punto, la información que brindó esta semana el diputado Pablo Kosiner: "Estamos trabajando para que el PJ vuelva al poder y nuestra opción es Urtubey, que ganó tres veces la gobernación".

En pocas palabras, podría interpretarse que el gobernador tiene la cabeza en otra cosa y que lo importante no es exhibir el resultado de una gestión sino el resultado de tres elecciones. Tres elecciones, por cierto, ganó Osvaldo García en Moldes, e igual lo van a intervenir.

De todas maneras, vale preguntarse qué puede pasar con la provincia.

¿Cambiamos? 

Lo que ocurra a nivel nacional repercutirá en el territorio salteño, pero el acercamiento extremo de Urtubey a Macri, por ahora, ha beneficiado a Cambiemos pero a Salta no le reditúa nada.

El Plan Belgrano, diseñado sin participación de salteños, no se presenta como un reparto de fondos sino como un programa que va a sumar a las provincias que hagan el esfuerzo por observar determinados parámetros.

El subsecretario de Planeamiento Territorial de la Nación, Fernando Álvarez de Celis, lo expresó sin ambigedades ante el Consejo Económico Social, el jueves, en Salta: "Toda la obra pública que se haga en el país debe estar planificada... No nos gusta hablar de financiamiento sino del impacto social... necesitamos fortalecer la institucionalidad de las provincias, ya que nosotros solo seremos un organismo facilitador y enfático de cómo deben direccionarse las políticas de planificación".

Álvarez de Celis no hablaba del Plan Belgrano sino del criterio de gestión, con objetivos, fundamentos y evaluación de resultados.

Es decir, para sumarse, Salta deberá revisar algunos criterios. De lo contrario, el único salteño que saldrá ganando es el gobernador.

Al fin, en el ranking

El oficialismo autóctono celebró esta semana que el Interbarómetro de la Fundación CiGob ubicó a Urtubey décimo en el ranking de los políticos más mencionados en las comunicaciones de redes sociales. Algo es algo.

De los veinte personajes rastreados, con el 0,9% de las menciones, superó a Ernesto Sanz, Florencio Randazzo, Felipe Solá, Hugo Moyano, Julio Cobos, Julián Domínguez, José Manuel De la Sota y Margarita Stolbizer. Quedó muy lejos de Mauricio Macri (57.5%), de Cristina Kirchner (14.6%) y apenas atrás de Horacio Rodríguez Larreta.

Además, volvió a participar de reuniones con el peronismo anti K para intentar influir en la normalización de un PJ que hace tiempo dejó de ser un partido, en el país y en Salta.

Pero esas inquietudes a nivel nacional son demasiado absorbentes.

¿Quién gobierna? 

Su estilo político es el liderazgo unipersonal y la centralización de las decisiones. Ese modelo se traduce en una gestión que solo se mide por la voluntad del gobernador.

Con un vicegobernador ausente, un gabinete anestesiado y un jefe de ministros cuyas atribuciones son institucionalmente dudosas, es previsible que estallen conflictos en todos los niveles.

El retaceo de fondos a la Municipalidad de la capital provincial no tiene otro propósito que el de tratar de disciplinar al intendente Gustavo Saénz, que se muestra como una figura con vida propia. Le aplican el correctivo que el ministro de Gobierno les había prometido a los 15 intendentes que derrotaron a candidatos urtubeicistas: el ahogo financiero.

En Coronel Moldes el problema no es el retaceo de fondos, sino la designación masiva de trabajadores rurales que quedaron sin empleo porque los productores pasaron del criollo al virginia. A eso se suman desaguisados administrativos, de los que el intendente García es solo la cara visible, que vienen de arrastre y que, de una u otra formas, se manifiestan en todos los municipios. 

Como prueba, la denuncia contra el concejal de Salvador Mazza, Mauricio Gerónimo. El Gobierno nacional lo busca por narcotraficante; en su currículum figura su cercanía con el inefable Carlos Villalba, su elección en 2011 como vicepresidente de la Juventud Peronista y su protagonismo en la vida política del norte.

El episodio, un caso más de vínculos entre el narcotráfico y la política, conmociona a la intendencia de Rubén Méndez. 

De todos modos, el desmanejo que le arruinó a Urtubey la visita de la vicepresidenta Gabriela Michetti es el escándalo de Parque La Vega. Unas doscientas personas rodearon a los funcionarios con denuncias de irregularidades gravísimas.

El gobernador, en este caso, no puede decir que "le hicieron una cama".

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