Unos 360 vecinos no tienen agua desde hace cinco días

Unos 360 vecinos no tienen agua desde hace cinco días

Las 64 familias residen en el loteo El Carmen. Por una obra de riego les rompieron un caño y deben proveerse con solo 5 litros de un grifo comunitario.

Ni una gota de agua. Desde hace un mes, un tanque cisterna abastece a 360 vecinos porque un improvisado caño que suministra agua al Loteo El Carmen fue roto por la empresa encargada de la obra del riego presurizado para el Valle de Lerma.

Pero el problema se arrastra desde 2002, cuando las 64 primeras familias de este loteo privado adquirieron estos terrenos a una familia reconocida de la zona. La mayoría pagó, pero hasta el día de hoy no tienen escrituración. Esta situación trajo aparejado que la empresa Aguas del Norte les solucionará el problema con una conexión precaria que alimenta unos tanques de 500 litros que hace las veces de cisterna comunitaria, construida por los propios vecinos.

"Estamos en lo mismo. Desde 2012 estamos buscando soluciones al abastecimiento con una red domiciliaria. Nadie nos da respuestas. No queremos nada gratis. Lo vamos a pagar. Han pasado los años y seguimos igual y peor", explicó Santos Alancay, representante de los vecinos.

LOS INCONVENIENTES

Cuentan los vecinos que el 2 de diciembre pasado, las máquinas que realizan el trabajo de presurización del sistema de riego para las fincas de la zona, rompieron el caño que lleva agua al loteo. "Desde ese entonces estamos con el suministro suspendido. Obtenemos agua a través de un tanque cisterna que tres veces al día ingresa al barrio para socorrernos. No entiendo por qué la empresa no arregló el caño roto. Hubieran solucionado el problema", cuenta Agustín Rearte.

El loteo está ubicado a 4 kilómetros de la ciudad de ROSARIO DE LERMA. Se accede por la ruta provincial 23 que une esta ciudad con Cerrillos. De loteo privado ahora se ha convertido en un barrio populoso. Está habitado por gente que trabaja, en su gran mayoría en el campo.

La cisterna comunitaria que alimenta a las casas está vacía. Para remediar el problema los pobladores se abastecen de una acequia que cruza la zona. El agua es para riego. Pero ante la necesidad deben recurrir a esta vieja práctica de aprovisionamiento de agua.

Otro grupo hace largas y tediosas filas en un grifo comunitario para almacenar 5 litros por familia. Más no se puede.

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