La UNLaR tiene nuevo estatuto y eliminó el último vestigio tellista

La UNLaR tiene nuevo estatuto y eliminó el último vestigio tellista

“Histórico” fue la palabra que uso el rector Calderón al celebrar la aprobación del flamante Estatuto Universitario. 

Pese a que hubo tensión previo a la votación, ya que sectores opositores intentaron ingresar a la asamblea e interrumpir la sesión, el oficialismo se impuso superando los dos tercios necesarios para aprobar dicho estatuto que entre otros puntos, limita la reelección indefinida y amplia derechos a alumnos, graduados, docentes y no docentes. La letra chica del Estatuto.

En una maratónica sesión, la Asamblea Universitaria decidió aprobar ayer el nuevo Estatuto, con 108 votos afirmativos de 153 asambleístas presentes. Así lo resolvió el máximo órgano de gobierno de la Universidad, con más de los dos tercios de sus integrantes.

La Asamblea se reunió en el Anfiteatro 17 de Octubre de la UNLaR, con la participación de 12 agrupaciones políticas para abordar la norma principal que rige la vida universitaria.

El límite a la reelección indefinida, el juicio político a funcionarios, el voto electrónico, la eliminación de las listas colectoras y la ampliación de derechos para estudiantes, graduados, docentes y nodocentes, son algunos de los principales cambios que se implementarán con la nueva normativa impulsada por el Movimiento Universitario La Toma (MUT).

Al finalizar la sesión, que se extendió por más de cinco horas, el rector Fabián Calderón destacó la posibilidad de que más de 150 miembros pudieran participar del debate.

La nota discordante de la jornada estuvo en que se registraron algunos hechos de violencia contra estudiantes de partidos de izquierda que se oponían al proyecto presentado por la Comisión Ad Hoc del oficialismo calderonista.

No obstante, el máximo órgano de Gobierno de la Universidad Nacional de La Rioja realizó ayer el dictado de la normativa que regula la vida dentro de la institución donde entre otros puntos se puso fin a la reelección indefinida, se aprobó el juicio político a funcionarios, el voto electrónico, la eliminación de las colectores, y la ampliación de derechos para estudiantes, graduados, docentes y nodocentes.

El debate previo y la conclusión

Es importante recordar que, durante las 16 sesiones que se realizaron a final del 2015 y a lo largo del 2016, hubo largos debates de los proyectos presentados por las agrupaciones que participaron en la comisión, como así también de las propuestas que hicieron el sindicato docente SIDIUNLaR, graduados, y la agrupación estudiantil A.R.M.O, en cada caso sobre sus estamentos.

De ese debate surgieron 77 artículos aprobados en forma unánime, 135 por mayoría, de los cuales solo 43 de ellos obtuvieron votos negativos siendo los restantes 92 aprobados por mayoría y algunas abstenciones.

Ayer se arribó a la etapa final de la asamblea, donde hubo 153 asambleístas presentes, de los cuales 108 votaron a favor y 47 en contra.

Éstos últimos, de listas independientes manifestaron su claro rechazo al proceder del oficialismo para llegar a la reforma estatutaria.

Pese a la aprobación de la mayoría, no se aceptó el voto nominal para ocultar las identidades y la sesión se levantó antes de conocer los votos negativos de los asambleístas opositores.

Fabián Calderón: “La oposición se agrupó al final para criticar la metodología”

Antes de la aprobación de la reforma, el rector Fabián Calderón dialogó con las emisoras radiales provinciales respecto de los incidentes producidos en las afueras del Anfiteatro 17 de Octubre.

“Tenemos los mecanismos para oponernos, debatir y disentir, pero no es forcejeando, ni impidiendo el ingreso, ni a los golpes cómo se logra la defensa de un proyecto de universidad pública ni mucho menos de un estatuto”, expresó.

Sostuvo por otro lado que, en el proceso de reforma “participaron las agrupaciones que formamos parte del consejo superior, discutimos, consensuamos y aprobamos la metodología y que se abrió a todos los espacios, nosotros no tenemos la culpa que la oposición se haya agrupado en este tiempo final para cuestionar la metodología, eso les cabe la responsabilidad a los distintos espacios”.

“Hubo la posibilidad de participar y presentar proyectos, fueron consensuados los artículos, que en el último tiempo, a días de sesionar la asamblea establezcan una posición la oposición, si en el último tramo decidieron hacerse visible la sociedad que tienen que ha servido como un sistema de colectoras en las elecciones pasadas y hoy plantean el rechazo es una decisión de ellos”, advirtió.

Información oficial: Se aprobó la reforma de un estatuto “participativo”

El nuevo estatuto propone una técnica legislativa ordenada, ya que el vigente contiene normas muy ambiguas, y además tiene lenguaje inclusivo. Esta nueva norma define la Educación Superior como “un derecho humano y un bien público social”; señala que “es un deber fundamental del Estado garantizar el acceso y la permanencia en ella de todos los ciudadanos en igualdad y libertad”; garantizando la pluralidad y la diversidad ideológica, política y religiosa.

En cuanto al gobierno y la gestión de la Universidad hay cambios fundamentales: la elección de las autoridades es directa y por medio del voto ponderado de los cuatro estamentos universitarios; se unifica la duración del mandato de las autoridades en tres años y se prohibe la reelección por más de un período consecutivo. Según se dispone, todas las autoridades electas están sometidas a juicio de responsabilidad política por su desempeño y su conducta, previendo la suspensión o la remoción del cargo.

En el plano electoral, establece que los comicios se realizan en forma directa, obligatoria, secreta, simultánea y por lista de candidatos completa; implementa el sistema de boleta única mediante el voto electrónico y elimina expresamente las colectoras; incorpora la elección directa de los directores de carrera; garantiza la representación de las minorías en todos los órganos de gobierno mediante el sistema de reparto proporcional D’Hont; asegura la representación de las sedes del interior en los órganos colegiados de gobierno; garantiza y amplía efectivamente la participación política mediante la reducción de las condiciones para ser Rector, Vicerrector y Decano; y garantiza a todas a las agrupaciones políticas igualdad para difusión de sus propuestas electorales en los medios universitarios.

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