La semana anterior el diputado Guillermo Castello presentó un proyecto ante la Legislatura para permitir que Uber funcione en Mar del Plata y en todo el territorio provincial.

 

Inmediatamente tuvo el rechazo de distintas entidades que nuclean a los taxistas y ayer sorpresivamente también se sumó el intendente Carlos Arroyo. El propio jefe comunal buscó a algunos medios para comunicar su postura. Estaba claro que quería enviar un mensaje político.

 

“Mientras sea intendente no permitiré a Uber en la ciudad. No vamos a permitir cualquier tipo de transporte extraño”, indicó Arroyo.

 

Loquepasa.net consultó sobre la postura del jefe comunal al diputado Guillermo Castello. El legislador provincial fue tajante. Habló de desconocimiento, sobreactuación, falta de control contra el transporte ilegal, falacias y la defensa de puestos de trabajo solo para taxistas y remiseros.

 

“Lo que primero me llama la atención es su desconocimiento del proyecto de ley, sobre el cual opina y sobre las competencias municipales. Dice que los automóviles de pasajeros no pueden circular sin carnet habilitante ni seguros, y esos requisitos más otros más como la VTV al día o la exigencia de estar inscripto tributariamente, están taxativamente regulados en el proyecto”, señaló el legislador marplatense.

 

Además resaltó que “el intendente no puede prohibir alegremente toda actividad que no le guste. Debe saber que hay competencias provinciales y una ley votada por la Legislatura, deberá cumplirla, le guste o no”.

 

Consultado sobre la postura de Arroyo y su interés en hacer público su postura negativa en torno a Uber, Castello dijo que “llama la atención la sobreactuación de su defensa de un sistema de transporte público que deja bastante que desear. Si la calidad fuera excelente, como explica los casi 4000 remises truchos que andan circulando por la ciudad, sino es porque existe una demanda insatisfecha de la ciudadanía por servicios más baratos?”, se preguntó.

 

En ese sentido agregó que “no puede decir que quiere proteger a los usuarios cuando circulan 4000 remises truchos que no tienen ningún control ni pagan impuestos y a su vez se niega a aceptar que ingresen estas empresas de redes de transporte que justamente se destacan por la seguridad que brindan a los pasajeros y porque al estar sus movimientos de pago bancarizados, es imposible la evasión fiscal”.

 

Las críticas al intendente continuaron. “Habla de defender las fuentes de trabajo, pero sólo mira a los que están adentro. A los 2000 taxis y 800 remises legales pero no contempla la situación de los 10.000 propietarios de automóviles que se inscribieron en estas plataformas y que quieren trabajar también y  están dispuestos a hacerlo cobrando pasajes más baratos”.

 

Finalmente Castello explicó que “lo que dice Arroyo respecto que el único problema de la baja demanda es la caída del poder adquisitivo de la gente, es una falacia porque si los viajes pudieran salir la mitad de precio, habría más gente tomando viajes y más conductores trabajando. Hay mucha gente que no puede pagar taxis porque son caros. Si salieran la mitad de precio, habría un mercado ampliado”, concluyó.