“Han aumentado los insumos, la levadura, sal, harina, los aditivos, y ni hablar de las facturas y confituras, además a eso hay que agregarle el valor de alquiler que pagan los panaderos que aun no tienen su local propio”, explicó Martinelli.

El delegado provincial de FAUPPA habló de la situación en Villa Mercedes, y afirmó que una familia tipo a veces no alcanza a comprar un kilo de pan, “ahora la gente compra por gramos, 200 o 300 como mucho, esto considerando que una persona consume un cuarto de kilo por día y 300 gramos solo alcanzarían para una sola persona”.

Asimismo, expresó que el consumo de este producto básico bajó alrededor de un 6% en comparación con mayo del año pasado.

Por otra parte, Martinelli se refirió a las “cuevas”, que venden el pan a precios bajísimos y perjudican así a las panaderías que tienen sus instalaciones en regla y sus empleados en blanco. “Aquí en Villa Mercedes estos lugares venden el pan a $18 0 $20 el kilo, y en las panaderías habilitadas ese precio es imposible de sostener porque se trabaja con productos de buena calidad y se le ponen los aditivos que corresponde al producto”.

“Queremos tratar de controlar el aumento, pero mientras aumenten la nafta y el dólar, nosotros lo vamos a ver reflejado en la carne, en el pan y en todos los productos de consumo básico”, dijo Martinelli anticipando un diagnóstico desalentador.

“Esperamos que el gobierno nacional implemente políticas para frenar los aumentos, porque la situación es lamentable, muy triste”, concluyó.