Tras la detención de Giri, Arroyo no logra salir de una fuerte crisis política

Tras la detención de Giri, Arroyo no logra salir de una fuerte crisis política

Siguen renunciando funcionarios. Ahora, el presidente del Concejo amenaza con alejarse.

 

El intendente Carlos Arroyo no tramita el mejor de los momentos. Sus primeros 100 días al frente del municipio de Mar del Plata fueron caóticos. La detención del -ahora ex- director de Turismo, Emiliano Giri, acusado de ser parte de una red de corrupción en Astillero Río Santiago, fue un cimbronazo del que todavía no logra recuperarse.

Pero la crisis va incluso más abajo en el armado político de la ciudad más grande -en términos de población- del interior bonaerense. En menos de 100 días, el intendente perdió a tres funcionarios -y el cuarto será en pocas horas-, en su gran mayoría todos envueltos en un halo de escándalo.

 

El primero fue Julio Razona, secretario de Seguridad, que se fue en medio de denuncias de corrupción cometidas presuntamente por la gestión anterior.

 

El segundo fue Miguel Guzmán, presidente del Ente Municipal de Vialidad y Alumbrado. El funcionario era “casi un hijo” para Arroyo, pero usó una camioneta oficial para ir a buscar maquinaria a Córdoba y, de paso, llevar a su hija a San Luis. Volcó y destrozó la camioneta.

 

El tercero fue el de mayor impacto. Giri apareció por todos los medios nacionales, esposado, y signado como “el primer funcionario de Cambiemos detenido por corrupción”. Los ecos del caso aún resuenan y seguirán resonando en los enconos políticos de Mar del Plata.

 

Ahora, el presidente del Concejo Deliberante, Guillermo Saenz Saralegui, reconoció que está distanciado del intendente. Y dijo que Arroyo "está agobiado por la catarata de problemas que tiene".

 

Saenz Saralegui y Arroyo fueron amigos inseparables y socios políticos durante años. Pero el poder los separó. Según destaca el portal 0223, el concejal asegura que Arroyo fue víctima de “los amigos del campeón”, gente que se le acercó a dar consejos y obtener algún beneficio a cambio.

 

Pero, por si fuera poco, el funcionario Sebastián Puglisi también se bajará del barco y a fin de mes dejará de ser el secretario de Cultura.

 

Hace poco menos que dos semanas, Arroyo pidió reunirse con los legisladores provinciales que representan a Mar del Plata. Curioso, al encuentro sólo asistieron senadores y diputados de la oposición. Mientras que el oficialismo pegó el faltazo.

 

"Arroyo nos dijo que está muy solo", aseguró el massista Gabriel Pampin al salir de la reunión de la que también participaron la diputada nacional Fernanda Raverta y el senador provincial Juan Curuchet.

 

Aunque se esbozaron varias explicaciones por la ausencia de Maximiliano Abad y del lilito Guillermo Castello quedó claro que fue un vacío al alcalde.

 

Controversial y polémico, el intendente asegura que no permitirá una suba del transporte público, en medio de las quejas de los transportistas que amenazan con suspender el servicio nocturno. Sin embargo, en la semana que pasó el Concejo aprobó un aumento de tasas del 27%.

 

Con todo, el intendente aseguró hace horas que es “mentira que haya subido los impuestos, sino que los bajé”. Arroyo ahondó en una explicación compleja: “supongamos que la inflación es de un 30%, aunque fue más. Y subí un 27% las tasas. En realidad, lo que hice fue bajar las tasas”, dijo.

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