A horas de las PASO y aunque se encuentra vigente la veda electoral desde el viernes a las 8 de la mañana, la mayoría de los precandidatos a jefe de Gobierno encontraron “la trampa” para seguir difundiendo sus políticas. La Ley prohíbe los actos proselitistas, todo tipo de declaración de propaganda política de candidatos y funcionarios y la difusión de encuestas. Por supuesto, esta medida también alcanza al periodismo, incluso el digital.

Sin embargo, la norma quedó desactualizada y no incluye las redes sociales. Twitter y Facebook quedaron fuera de la prohibición y los miembros de cada partido sacaron provecho del vacío legal. Algunos difundieron promesas, spots de campaña, y hasta imágenes que recordaban triunfos en elecciones anteriores.

Otros, por su parte, apostaron por publicar fotos de sus cierres de campaña acompañados por militantes y colegas. Pero la estrategia no terminó allí, varios escogieron no expresarse directamente pero retuitearon todos los mensajes en los que recibían elogios de otros usuarios. Asimismo, varios usuarios registraron cuentas falsas, creadas en los últimos días, para difundir la campaña.