La iniciativa permite el uso de las bolsas “transparentes”, “de bobinas” o “de arranque”, destinadas a contener alimentos húmedos o comestibles que no estén previamente envasados, como así también las de tela o papel destinadas al transporte de la mercadería.

Aspesi propuso otorgar 6 meses a los comercios para que puedan adaptarse a la normativa y sanciones para aquellos que incumplan con esta medida tendiente a proteger el medioambiente. Sumado a esto, destacó la necesidad de que el Departamento Ejecutivo realice una campaña de difusión previa para concientizar a la población.

En cuanto a los fundamentos, el líder del GEN advirtió que la degradación de las bolsas plásticas demora entre cien y 400 años. Agregó que el 2 por ciento de las que adquieren los supermercados para entregar a los clientes van al relleno sanitario sin uso, debido a que están rotas o mal dobladas.

Aseguró que esta prohibición se sumaría a otras medidas ya adoptadas por la comuna para preservar el medioambiente y que la no entrega de “camisetas” contribuiría a separar residuos en origen para ahorrar en la compra y administración de las bolsas de residuos.

Aspesi agregó que las bolsas plásticas son levantadas por el viento y ensucian los paseos serranos, como así también las inmediaciones del relleno sanitario y obstruyen los desagües pluviales.

Por último, señaló que otros municipios ya implementaron esta medida que no requiere una erogación económica por parte del Estado municipal e invita a reeducar a la población en el respeto por el ambiente en una ciudad que goza de una aceptable calidad de vida.