Gran parte de la población de la Toma está sin agua desde el lunes, los Bomberos Voluntarios calculan que serían la mitad de los vecinos de la localidad. Ese día por la mañana, empleados municipales empezaron a trabajar en el destape de unos 500 metros de un caño madre que las llaves que brindan el suministro a varios barrios. Este miércoles por la mañana hubo un corte general por las reparaciones.

“Este fue un problema serio e inesperado. El martes cambiamos una brida metálica y una abrazadera y hoy tuvimos que salir a comprar repuestos fuera de la localidad. En este momento estoy viajando hacia La Toma con otra brida y otra abrazadera. El personal trabajará durante toda la noche y el jueves por la mañana estará todo solucionado”, explicó el intendente Francisco Cornejo.

Mientras tanto, los Bomberos Voluntarios reparten agua en camiones desde el martes. “Vamos a recibir refuerzos que nos enviarán San Luis Solidario y Vialidad, seguiremos llevando agua a los barrios”, informó el vicepresidente del cuartel Víctor Robert.