Un SUTE "politizado" arranca las paritarias en Mendoza

Fuentes del oficialismo señalan a Kolina y a la CTA por utilizar al SUTE para presionar en el armado de listas departamentales.

 

A menos de un mes del inicio de las clases, este lunes a las 17, los trabajadores de la educación tendrán su primera reunión paritaria del año para acordar la suba salarial del 2015. El año pasado, las negociaciones comenzaron aproximadamente en la misma fecha y el acuerdo llegó recién en abril.

Tras el rechazo de los ofrecimientos que realizaba el Ejecutivo, los docentes no iniciaron las clases y realizaron una multitudinaria marcha en busca de mejoras salariales. Recién en abril aceptaron el 30,5% de incremento salarial en una sola cuota. El mismo porcentaje fue el que el Gobierno otorgó al resto de los trabajadores estatales. 

Sin embargo, teniendo en cuenta los días que se vienen, el titular del Sindicato Unido de los Trabajadores de la Educación (SUTE), Adrián Mateluna, se niega a hacer declaraciones y mantiene el silencio sobre la postura del gremio y el porcentaje de incremento que buscan.

Según deslizaron fuentes del Frente para la Victoria (FPV) y del Gobierno provincial, para este silencio habría una razón. En esos sectores apuntan a la agrupación Kolina y la CTA oficialista por una supuesta utilización del SUTE como herramienta de presión para negociar cargos en las próximas elecciones, especialmente en las listas de concejales de los departamentos que tendrán Primarias el 19 de abril.

Por ahora, Kolina y sus allegados avanzan fuertemente con la candidatura de Juani Jofré en San Carlos como principal figura.

El 28 de febrero es la fecha límite para cerrar las listas y, según sectores del oficialismo que no comulgan con Unidos y Organizados, la paritaria se transforma en el escenario ideal para presionar al Gobierno por un espacio. Sin embargo, el titular de la CTA oficialista, Gustavo Correa, desmintió rotundamente esta versión y acusa a las ramas del oficialismo cercanas al Ejecutivo provincial de “subestimar a los trabajadores de la educación”.

“Esto muestra la debilidad del Gobierno, son unos inútiles”, disparó Correa y aseguró que buscan encontrar un chivo expiatorio. De esta manera, el dirigente sindical negó que las agrupaciones estén utilizando al SUTE con algún fin político.

Sin embargo la titular de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Raquel Blas, también puso en duda la actitud del sindicato y sus dirigentes, especialmente de Adrián Mateluna, quien evitó cualquier contacto con la prensa y no salió, a diferencia de años anteriores, a pedir la pronta apertura del proceso de negociación. “Resulta muy raro que, en este contexto, el SUTE se niegue a hacer declaraciones”, dijo.

“No se qué elementos inciden en el armado de las listas del Partido Justicialista (PJ). Todo puede ser posible, quizá sea grave, pero es histórico que el SUTE esté ligado al oficialismo”, añadió Blas. El problema para los dirigentes es que las paritarias de los docentes son las que marcan la pauta del resto de las negociaciones y se quejan porque después de ese acuerdo tienen que seguir “peleando” ya que consideran que año tras año es un acuerdo a la baja.

Para la gremialista, cada uno es libre de militar donde quiera, siempre y cuando no se dejen de defender los derechos de los trabajadores. Desde el interior del SUTE coinciden en que los mejores acuerdos históricos se lograron en años electorales, pero para eso habrá que esperar el avance de las negociaciones. De todos modos, si la paritaria se dilata y los acuerdos salariales se demoran en llegar, una vez más peligra el inicio de clases previsto para el 2 de marzo.

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