Ya son tres los casos de dengue registrados en Tucumán. Como se recordará, el primero fue confirmado el viernes por las autoridades del Sistema Provincial de Salud. El domingo había surgido un caso posible, de un viajero que retornó de Brasil; y el lunes aparecieron otros cuatro: dos de vecinos que también regresaron de ese país y otros dos de tucumanos que volvieron de Paraguay. El resultado de los análisis determinó que estos dos últimos sí padecen el mal, mientras que los otros tres (los que veranearon en tierras brasileñas) fueron descartados.

La provincia sigue en alerta, pero afortunadamente no han sido registrados todavía casos autóctonos, es decir, personas que se hayan infectado en Tucumán. Ayer, además, no se reportaron más casos sospechosos. 

La doctora Sandra Tirado, secretaria ejecutiva médica del Ministerio de Salud de la Provincia, confirmó toda esta información y destacó que el lunes mismo fueron implementadas las medidas de sanitarias de bloqueo en los alrededores de los domicilios de las personas afectadas. 

La profesional insistió en la importancia de que todos mantengan y profundicen las medidas de prevención.

Aislar el paciente

El dengue no se contagia por contacto personal, ni con la ropa del paciente; sólo se contagia por la picadura de un mosquito (el aedes aegyptis) que a su vez esté infectado. Entonces, ¿por qué se aísla a los pacientes? Precisamente, para impedir que se les acerquen y los piquen mosquitos sanos y que ellos trasladen el virus desde el enfermo a los demás miembros de la familia y que se extienda por el barrio. Lo ideal es destinarle al enfermo una habitación para él solo y usar mosquitero, además de repelentes sobre la piel, espirales o tabletas termoevaporables. 

“En estos casos sí se recomienda hacer fumigaciones -explicó Tirado-. Los insecticidas matan sólo los mosquitos adultos, que son peligrosos si entran en contacto con personas enfermas”, subrayó. Estas fumigaciones forman parte de las medidas de bloqueo: se elimina todo posible criadero de nuevos mosquitos (para tratar de impedir que se reproduzcan) y se matan los adultos en una radio de nueve manzanas a la redonda de donde están los pacientes para cortar la cadena de propagación. 

A nuestro alrededor

Como ya había adelantado Tirado, la situación más grave se vive en Formosa, donde ya el sábado se habían confirmado 74 casos (la mayoría en la capital), muchos de ellos autóctonos. 

Según informa la agencia de noticias Télam, hasta el lunes habían dado positivo los tests de 10 pacientes en Corrientes (sobre más de 300 notificaciones de sospecha) y hasta ayer eran 16 los confirmados en Santa Fe (todos importados), 11 de ellos en Rosario. También ayer se reportó el sexto caso importado en una adolescente de 13 años que había regresado días atrás con su familia desde Brasil. 

Paralelamente, fue confirmador el primer caso en Santiago del Estero. Se trata de una mujer que se contagió en Paraguay, hacia donde había viajado en los primeros días de enero. La paciente permanecía ayer internada en el Hospital Independencia de la capital de esa provincia. Según el ministro de Salud santiagueño, Luis Martínez, su evolución era favorable.

Medidas de prevención 

Mantené limpio y descacharrado tu hogar

Vaciá todos los recipientes donde haya agua limpia y quieta (latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico y lona, bidones cortados). El mosquito del dengue no deposita sus huevos en agua sucia o servida. Si querés conservar tus plantas, es conveniente poner arena húmeda en los floreros. No coloques borra de café en ellos, porque puede servir de alimento para el mosquito.

Ante cualquier síntoma, recurrí al médico

Si tenés fiebre alta, dolor de cabeza y ojos, y sarpullido, concurrí de inmediato al CAPS u hospital más cercano. Si viajás hacia alguna zona endémica como Brasil, Paraguay o el Caribe, consultá las direcciones de los centros sanitarios. No te apliques inyecciones intramusculares, ni tomés aspirinas o ibuprofeno, porque ocultan los síntomas del dengue. Mantenete hidratado.

La ropa puede protegerte de las picaduras

Si desarrollás actividades al aire libre, usá ropa gruesa y clara, mangas largas con puño y pantalones largos. Si tus prendas tienen tela fina, rociála con repelente, ya que los mosquitos pueden picar a través de ellas. También es importante usar medias, ya que los mosquitos suelen atacar tobillos y piernas.

Usá repelente 

Ponete repelente cada dos horas, especialmente por la mañana y por la tarde, en el crepúsculo. El aedes aegyptis pica durante el día, pero también puede confundirse con alguna luz artificial y alimentarse de noche. También podés combatir los mosquitos con espirales y tabletas repelentes. Hay una alta variedad de repelentes en el mercado para elegir; perfumados, de gel y spray.

Vacaciones en países limítrofes

Si vas de vacaciones a Brasil, Paraguay o el Caribe, evitá visitar lugares con proliferación de mosquitos, como zonas con lagos y embalses. Llevá siempre repelente. Si te alojás en un camping, rociá la carpa con un insecticida antes de dormir y prendé un espiral. Si vas a hotel, lo ideal es permanecer en cuartos con aire acondicionado. Llevá el aparato y las tabletas repelentes. 

Alerta embarazadas

Antes de viajar consultá con tu obstetra y extremá las medidas preventivas contra el dengue, sobre todo si estás en el primer trimestre de gestación. Para los bebés se recomienda cremas o aceites naturales a base de citronella. Su baja toxicidad, alta tolerancia y su agradable olor son sus principales ventajas.

Fumigá tu casa y usá insecticidas

Esta enfermedad sólo se transmite a través de la picadura del mosquito aedes aegyptis, no de persona a persona. El mosquito sólo se contagia al succionar sangre de humanos infectados, y almacena el virus en sus glándulas salivales. Cuando más tarde, pica a una persona sana, le transmite la enfermedad. Matando al mosquito se erradica el dengue, pero lo ideal es usar repelente.

Colocá mosquiteros en las puertas y ventanas de tu casa

Una buena opción para que los mosquitos no entren a tu casa, es la instalación de telas mosquiteras en las puertas y ventanas. Pueden conseguirse de plástico y de aluminio en loneras y ferreterías. También podés cubrir las cunas y los cochecitos de los bebés con esta tela. Tu casa estará ventilada y al mismo tiempo, libre del acecho de bichos.

Aplicá larvicidas en tanques y cisternas

Sólo se puede usar larvicidas en los recipientes que no pueden ser destruidos o tapados, como por ejemplo tanques, cisternas y aljibes. No deben ser tratados con estos compuestos aquellos recipientes y depósitos que puedan ser eliminados así como tampoco ollas, utensilios de cocina, bebederos de animales, instalaciones sanitarias, piscinas ni otros objetos en uso diario. 

 Capacitación de personal

La doctora Sandra Tirado, secretaria ejecutiva médica del Ministerio de Salud, informó que llevan a cabo un refuerzo en la capacitación permanente que recibe el personal de salud. “Estas jornadas permiten organizar equipos y concentrarnos con más fuerza en el personal con menos experiencia, especialmente ahora que hay gente de vacaciones”, explicó.