La Legislatura de la Ciudad fijó un aumento máximo del 30 por ciento en el impuesto de Alumbrado, Barrido y Limpieza (ABL) para el año próximo, que recaerá en las propiedades más caras y que será “transitorio”, es decir que puede ser aumentado en caso de algún desequilibro económico trascendente.

 

La iniciativa, autoría del legislador del PRO Alejandro García y con el aval del bloque UNEN, estableció “para el ejercicio fiscal 2015 un tope de aumento del 30 por ciento, respecto de lo determinado en el periodo fiscal anterior, para los tributos que recaen sobre los inmuebles radicados en la Ciudad”.

 

Las propiedades más caras, aquellas con valor fiscal superior a los $300.000, tendrá el máximo aumento fijado. Para las de valuaciones inferiores, el ajuste podrá ser menor y también dependerá de su valor fiscal.

 

Las subas en el ABL comenzaron hace tres años y habían tenido incrementos de hasta 300% en 2012 y de hasta 100% en 2013, cuando desde el macrismo argumentaron que en algunos casos se pagaban sumas muy bajas. Para 2014, el alza tuvo un tope del 40% en las propiedades más caras y del 20% para las de menor valor.

 

Desde hace tres años, los aumentos se dan a partir de una actualización de los valores fiscales de las propiedades, que no puede superar el 1% del valor de mercado: por ejemplo, una propiedad de un millón de pesos no paga más de $10.000 de este impuesto por todo el año.

 

El nuevo ordenamiento impositivo determina que será la Legislatura la que establezca cada año cuál será el monto de la tasa.