Con una serie de gestos del gobernador de Córdoba hacia el referente del Frente Renovador, en plan de abonar la posibilidad de una interna con el massismo, se lanzó por la presidencia José Manuel De la Sota.
El gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, relanzó su precandidatura presidencial con fuertes críticas al jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri y su par bonaerense, Daniel Scioli, pero sin mencionar al máximo referente del Frente Renovador, Sergio Massa, con quien podría cerrar un acuerdo electoral.
De la Sota relacionó a Macri con "la ortodoxia económica neoliberal" de Domingo Cavallo, Carlos Menem y Fernando de la Rúa, mientras que a Scioli lo vinculó con el "aventurerismo económico" del kirchnerismo.
"Lo que Argentina nos pide, más que nunca, es la construcción de un nuevo modelo de Nación, y eso es lo que debemos elegir este año. Más que elegir una persona vamos a elegir un país", enfatizó el mandatario cordobés ante el colmado teatro Astros de la avenida Corrientes, en pleno centro porteño.
Fue en ese escenario, en que De la Sota realizó su propuesta "superadora" del "péndulo maléfico" que representa, según evaluó, "la ortodoxia económica neoliberal" y el "aventurerismo económico" del gobierno.
Prueba de esta negociación fue la presencia de los intendentes massistas Joaquín De la Torre (San Miguel) y Jesús Cariglino (Malvinas Argentinas), quienes estuvieron en primera fila.
Por el Frente Renovador también estuvieron el precandidato a gobernador Francisco De Narváez y los diputados nacionales Marcelo D'Alessandro, Ignacio De Mendiguren y Felipe Solá.
Comentá la nota