"Sólo la gente ignorante comería milanesas de soja"

"Sólo la gente ignorante comería milanesas de soja", sentenció el militante peronista histórico y actual activista ecológico, Jorge Eduardo Rulli, en su paso por Santa Rosa.
El fundador y referente del Grupo de Reflexión Rural (GRR) brindó ayer una conferencia de prensa en el hotel Cafulcurá con el objetivo de anticipar la charla-debate que expondrá hoy, a las 19.30 en la biblioteca de la Legislatura, sobre "El modelo de país, la sojización y las nuevas dependencias".

Acompañado por el diputado provincial, Darío Hernández, Rulli habló entre otros temas de los inconvenientes de la sojización, a la que calificó como impuesta por las necesidades del mercado global y no por decisión de los productores agropecuarios. Comparó que en Europa existía una predisposición de la población por "cambiar los forrajes de los alimentos" y que en la Argentina de la época alfonsinista se necesitó dólares para pagar los intereses de la deuda arrastrada por la última dictadura militar argentina. Amplió que, en ese momento, se le sugirió al presidente de la Nación, Raúl Ricardo Alfonsín, que cultive soja por lo que el primer mandatario radical propuso la realización de este cultivo en forma convencional para conseguir divisas.

Fumigación.

Rulli indicó además que en 1996, y por la influencia de Monsanto, se llegó a la soja transgénica. Puntualizó que, en ese momento histórico, existía un millón y medio de hectáreas de soja en el país, y luego se sumó un millón y medio por año, hasta llegar a los veinte millones actuales.

Para el activista ecológico, las consecuencias de este proceso se contemplan en una "fumigación" masiva de la población, niños nacidos deformes, cáncer, abortos y despoblamiento en los campos. Además sostuvo que, con este cultivo, se está hipotecando el futuro del país. Agregó que el territorio es entregado a las empresas para que efectúen monocultivos y completó que hoy no comemos lo mismo sino "chatarra" que contiene soja transgénica.

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