Rosario Central garantizó que los violentos que agredieron el domingo a dirigentes de Racing, periodistas partidarios y también a otros hinchas en el Gigante de Arroyito serán "expulsados del club" si integran el padrón de socios. La dirigencia se excusó de las fallas en la seguridad, ya que ese aspecto “no está a cargo” de la institución.

Así lo expresó este lunes el vicepresidente primero de la entidad canalla, Luciano Cefaratti, y profundizó incluso que pedirá "a la Justicia que actúe" para sancionar el comportamiento de un grupo vandálico, que atacó a miembros de la Comisión Directiva de Racing antes del partido, en la zona de palcos, y a cronistas cuando terminaba el primer tiempo en el sector de pupitres de una de las plateas.

"Lo que pasó fue una cosa de locos, lo repudiamos enérgicamente. Hay cosas que a veces superan la razón y no se pueden justificar", asumió el número dos de la entidad de Arroyito en diálogo con la agencia Télam sobre los graves hechos de violencia vividos en el último partido.

Antes del inicio del encuentro, un grupo de personas identificadas con los colores de Central, algunos integrantes de la barra brava, agredió a dirigentes y allegados de Racing que ocupaban uno de los palcos del estadio con vidrios polarizados.

Posteriormente, sobre el final de la primera parte, cuando la visita ya ganaba 1-0, otro conjunto de violentos intentó golpear y atacó con proyectiles de gran tamaño a trabajadores de prensa que se encontraban en un lugar autorizado para desarrollar sus tareas durante el partido.

La gravedad de la situación hizo que los periodistas abandonaran el lugar escoltados por algunos efectivos policiales y agentes de seguridad privada de Racing. Una vez encontrado el resguardo en la zona del vestuario visitante, fueron expulsados a la calle por decisión del encargado de la seguridad del estadio de Central.

"La organización de la seguridad en los partidos no está a cargo del club", se excusó Cefaratti, tras asumir la responsabilidad dirigencial porque la infraestructura del Gigante "no está en condiciones" de garantizar la integridad física de sus asistentes.

"Había un clima enrarecido porque durante la previa se dijo que desde Central se iban a vender entradas para hinchas neutrales y eso fue falso. Nunca se vendió un boleto a nadie que no fuera del club", aclaró.

Luego, Cefaratti comentó que el presidente de Racing, Víctor Blanco, le "agradeció enormemente" por la protección brindada una vez desatados los disturbios.

“Fue lamentable lo que vivimos”

Al respecto, Blanco declaró: "Fue lamentable lo que vivimos en la cancha de Central. La seguridad no estuvo presente en ese momento y por eso sufrimos las agresiones”.

"La seguridad no estuvo presente en ese momento y por eso sufrimos las agresiones", añadió al respecto el máximo dirigente de Racing.

Blanco, quien además se solidarizó con los periodistas que también fueron agredidos al finalizar la primera parte del encuentro, con el marcador 1-0 a favor de Racing por el gol de Gastón Díaz, detalló cómo se sucedieron los desmanes en el sector destinado a los dirigentes de Racing.

"Los violentos rompieron los vidrios del sector en el que nos encontrábamos. Una parte de los agresores ingresó y otra parte no lo pudo hacer, pero le pegaban a los vidrios para intentar romperlos y así ingresar. Eran alrededor de 45 personas", contó.

"Tuvimos que lamentar personas que sufrieron heridas cortantes y traumatismos en varias partes del cuerpo. Se vivió un momento de mucha tensión", describió.

El directivo, de 66 años, relató por último lo que ocurrió una vez que finalizaron las agresiones: "Una vez que terminó todo, los dirigentes de Central me llevaron a mi, a mi mujer e hijas al palco y los demás miembros de la comisión directiva se tuvieron que ir del estadio".