Sigue el desastre en el Bajo por un tapón en la cloaca

Sigue el desastre en el Bajo por un tapón en la cloaca

El EPAS trabaja en una colectora para destaparla. La tormenta hizo un gran socavón en una calle.

Neuquén.- Un tapón en la cañería colectora de la calle Nordenstrom fue el causante de los derrames cloacales que afectaron a los vecinos del Bajo, que ayer todavía reclamaban la asistencia del EPAS y el Municipio para que desagoten sus viviendas.

La empresa provincial de agua y saneamiento trabajó durante toda la madrugada para tratar de retirar el barro de lluvia acumulado en la línea troncal que une el oeste de la ciudad con la planta Tronador.

En la esquina de Nordenstrom y Beltrán, un enorme socavón destruyó el asfalto y complicó las tareas, pero Eduardo Vidal, gerente de Servicio, confiaba en liberar la cañería con el correr de las horas.

Cuatro cuadras más arriba, en Alcorta y Nordenstrom, los vecinos peleaban contra el desborde cloacal. Un verdadero río de aguas servidas salía por las dos tapas, que quedaron desacomodadas por la presión del líquido nauseabundo, que llegaba hasta Láinez.

Al menos nueve cuadras se vieron afectadas por el problema, aunque no a todos los vecinos les ingresó agua en sus viviendas. Magdalena Maureira fue una de las más perjudicadas. La cámara séptica se le reventó y entró todo por la puerta, mojando muebles y electrodomésticos.

Por este problema de pérdidas cloacales, hoy cambiará el recorrido de los colectivos de forma temporaria, hasta solucionar el taponamiento. Será en los ramales 3, 4, 7A/B, 14, 15, 17 y 18.

Claudio Moraga es el dueño de un complejo habitacional en Intendente Mango y Alcorta. La cloaca se desbordó el jueves y tuvo que utilizar tres bombas para intentar desagotar. Al menos tres casa quedaron inundadas. Ni él ni sus inquilinos pudieron cuantificar sus pérdidas.

El enojo de los vecinos fue por la falta de respuestas del EPAS. “Desde el miércoles hicimos más de 40 reclamos, al final nos trataron bastante mal y hasta nos insultaron”, se quejó Moraga. Maureira tuvo los mismos inconvenientes. Ayer después del mediodía un camión chupa les vació la cámara.

Vidal informó que hasta que no reparen el tapón en la cañería no pueden hacer nada por los vecinos, ya que el líquido no tiene por dónde fluir. “No se puede hacer mucho más de lo que ya están haciendo con los chupas”, lamentó.

“No sé quién se va a hacer cargo. Perdimos casi todo porque se nos inundó la casa con la cloaca. Vamos a demandar al EPAS”. Magdalena Maureira. Vecina de la calle Alcorta

Olores: En estos días de calor los malos olores cloacales se sienten en toda la ciudad por los desbordes.

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