Sesma, Ovejeros, De la Sota y Pascual, los más faltadores

Sesma, Ovejeros, De la Sota y Pascual, los más faltadores

Al cabo de unas 50 sesiones (ordinarias, especiales y preparatorias) que realizó el Concejo Deliberante de Córdoba entre febrero y diciembre de 2016, el ranking de los ediles más faltadores se repartió entre tres mujeres y dos hombres, provenientes de diversos bloques políticos.

 

El primer puesto fue para 
Laura Sesma (Social Democracia), quien no asistió en 10 ocasiones: el 20 por ciento de las sesiones. Se ausentó en seis oportunidades y en otras cuatro no participó por licencia para viajar al exterior.

Segundo se ubicó el concejal de Unión por Córdoba Pablo Ovejeros (UPC), con ocho faltas. Terceros estuvieron Natalia de la Sota –excompañera de fórmula de UPC con Esteban Dómina– y Marcelo Pascual, del Frente Federal de Acción Solidaria (FFAS), con seis inasistencias cada uno.

 

Ovejeros y De la Sota tuvieron un perfil de participación bajísimo en el recinto en todo el año. Casi no formaron parte de los debates.

 

Quinta estuvo María Reales, de ADN, con cinco faltas. Myriam Acosta (Juntos por Córdoba) tuvo cuatro faltazos; Eugenia Terré (FFAS), 3; y Eduardo Serrano (UPC), 3. El registro surge de las planillas de administración del Concejo y no cuenta inasistencias a las comisiones, que son mucho más masivas y generalizadas.

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Salvo los casos de expresa licencia “sin goce de sueldo”, las faltas se registran “con aviso”, por lo cual no se reflejan nunca en descuentos de haberes.

Pero al margen de estas consideraciones, la cuestión del presentismo cobró este año particular relevancia en el Concejo, porque desató conflictos en filas del oficialismo y reproches institucionales por parte de la oposición.

Fue a fines de octubre cuando Juntos por Córdoba suspendió una sesión con el argumento de realizar tareas de mantenimiento en el edificio, cuando el motivo real, luego admitido, era la inasistencia –por viaje al exterior– de seis ediles propios, lo cual dejaba al oficialismo en minoría.

Justamente ese episodio motivó luego la ruptura del bloque de Juntos por Córdoba, con Sesma, la más faltadora, abriendo una bancada propia y acusando a sus pares del oficialismo de “irresponsabilidad” por haber cerrado el Concejo, en lugar de sesionar en otro edificio.

Esa polémica dejó tela para cortar respecto de los motivos y condiciones de algunas inasistencias. Sesma admitió haber pedido licencia por dos viajes al exterior (China y Estados Unidos), y reivindicó haberlo hecho “sin goce de dieta”.

Por su lado, cuatro ediles oficialistas (tres radicales y uno macrista) que asistieron en Colombia a un congreso sobre terrazas verdes se ausentaron con pasajes solventados por el Concejo, a un costo de casi 33 mil pesos en boletos aéreos.

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