Integrantes de los colectivos "Mujeres Autoconvocadas" y "Todas Somos Andrea" realizaron una serie de críticas a la Dirección de Políticas de Género de Santa Rosa y calificaron como en "grave riesgo" a la situación en que están mujeres y niños en el Hogar de Medio Camino para las víctimas de violencia de género.

"Nos vemos en la obligación de hacer públicas una serie de deficiencias de gestión en la Dirección de Políticas de Género de la Municipalidad de Santa Rosa, las cuales ponen en grave riesgo a las mujeres y niñxs que, transitoriamente, residen en el Hogar de Medio Camino para víctimas de violencia de género", expresaron en un comunicado.

Y agregaron: "Mantenidas las correspondientes reuniones con las autoridades municipales del área, así como conversaciones y reclamos reiterados de manera telefónica, comprobamos que la inacción persiste. Ante la carencia de otra vía administrativa para instar el cumplimiento de esas obligaciones, hacemos pública la imperiosa necesidad de que todo el personal afectado a prestar servicios en ese espacio de contención sea femenino, tal como lo indican los protocolos confeccionados por las organizaciones especializadas en la problemática. Asimismo, ese personal debe tener capacitación o lineamientos básicos para trabajar con el grupo de riesgo mencionado. Caso contrario, se propicia el agravamiento de las condiciones generales de esas mujeres y perjudica el abordaje integral al que tienen derecho a acceder".

También desde los colectivos nombrados, se exige que se garanticen con regularidad las condiciones de seguridad y salubridad para las personas que allí se encuentran. "Esto implica: mantener el patio en condiciones que impidan la incubación de mosquitos y hormigueros, proveer de repelentes y espirales para combatir las picaduras, amoblar los departamentos con ventiladores y prever la colocación o reparación de calefactores para el invierno, proveer de agua potable o potabilizar aquella que se encuentra en los tanques, colocar cámaras de videovigilancia monitoreadas en las inmediaciones del inmueble y reforzar las medidas de seguridad en todo el perímetro, sobre todo en lo que hace al alumbrado", explicaron.

"Entendemos que es urgente la confección del protocolo de ingreso, tratamiento y convivencia, cuya obligación recae sobre la autoridad máxima de la Dirección de Políticas de Género. Esta herramienta debe contener, de manera obligatoria, un examen psicofísico sobre los niños y niñas que ingresan al espacio. Por último, exigimos que a la brevedad se ponga en conocimiento de la comunidad santarroseña el Plan de Acción diseñado para prevenir y erradicar la violencia de género", concluyeron.