Sergio Bohe optó por darle crédito a Aranguren porque hasta ahora no habló como ministro, sino como empresario que se dedica a la política. Las declaraciones del ex CEO de Shell, Juan José Aranguren, cuando la alianza Cambiemos aún atravesaba la campaña fueron las que peor lo posicionaron en la expectativa sobre cuál podría ser una eventual relación con las provincias productoras de petróleo. Es que a sus antecedentes empresariales, que no habían sido bien recibidos en la zona con la desaparición prácticamente de Shell, se sumó la visión sobre la estatización de YPF y la consideración de que en términos económicos era más conveniente no producir combustible, sino adquirirlo en el mercado internacional.Sergio Bohe, que será después del gobernador electo, Mario Das Neves, el interlocutor más directo con el resistido ministro se mostró prudente a la hora de analizar la designación, subrayando que se trata de declaraciones de un "futuro" funcionario, y que solo cuando éstas correspondan a un ministro después de la jura, e impliquen políticas públicas, se debe reaccionar. "El día que así sea, nos pondremos los tapones de aluminio y saldremos a la cancha" enfatizó quien por ahora le concede "el beneficio de la duda".

PRODUCCION Y EMPLEO

"Nosotros tenemos una posición política, ideológica, que no es la misma que el color nacional, pero entendemos que más allá del alineamiento y de estar en acuerdo o desacuerdo con las declaraciones, lo que vamos a discutir son políticas públicas: cuánta plata queda en Chubut y como se defiende la producción y el empleo" subrayó Bohe.De esta forma, planteo el escenario admitiendo que Aranguren "no es un gran conocedor de la problemática de la región; es un hombre de la industria, del sector privado, y nosotros tenemos que defender los intereses de Chubut: el empleo, los recursos, la agregación de valor, la producción, exploración y reservas, Vamos a abrir un espacio, tiene todavía el beneficio de la duda, y no vamos a hacer juicio de valor negativo; al contrario, vamos a esperar".Con esos pilares planteados como base, Bohe sostuvo que se trata de avanzar en una agenda que contenga los puntos de interés para ir hacia adelante en ese sentido, incluyendo también como eje una relación madura con las operadoras, sobre todo con YPF, "que hasta ahora no es la mejor", con lo que consideró que "no hay que tener tantos preconceptos" dado que el que gana elige a sus ministros; lo mismo sucede en términos provinciales, y esos serán los jugadores en la mesa.En ese mismo sentido de agenda y "jugadores", anticipó que intenta coordinar con Mendoza y Neuquén una línea de trabajo conjunta para la defensa del empleo, el recurso y la cadena de valor, no obstante lo que fije como política de estados productores la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburo (OFEPHi), donde señaló que la atención está puesta hoy en el acuerdo de precios para el crudo y en cómo se sostiene para garantizar los puestos de empleo y la producción en las provincias."A lo mejor Aranguren desconoce el tema político y la gestión pública, pero sus declaraciones son las de un ministro que no juró. El día que diga eso después de que juró -y eso implique una política pública-, nos vamos a poner los tapones de aluminio y saldremos a la cancha. La capacidad de movilización de los trabajadores está, lo mismo que la capacidad de defensa de los intereses de Chubut", sostuvo.Por último, Bohe indicó que el planteo provincial será "mejorar lo que firmó la OFEPHi en su momento, que era más que nada basado en las necesidades más urgentes de Neuquén; o la necesidad de impulsión de trabajo que las necesidades de la provincia de Chubut en su conjunto. Esto tiene que ver con cuántas pymes están trabajando y a cuántos trabajadores se les pidió la renuncia a fin de mes. Esas cuestiones son las que nos preocupan".