Senado: Los gobernadores se acercan a las fuerzas provinciales para aislar a Cristina

Senado: Los gobernadores se acercan a las fuerzas provinciales para aislar a Cristina

Golpeados por la derrota, sondean un interbloque con sus pares no peronistas que los acerque al quórum.

Los gobernadores peronistas sintieron el golpe de su pésima elección y para fortalecerse gestionan en el Senado un interbloque con fuerzas provinciales, que les permita sostener la primera minoría sin hablar con Cristina Kirchner.

El domingo el bloque de Miguel Pichetto perdió 7 de las 15 bancas que puso en juego, pero dos de esas prefiere ignorar: la de Cristina Kirchner y la de la santacruceña Ana Maria Ianni. No podrá esperar muchas presencias de Carlos Menem, reelecto por otros 6 años, esta vez por la sigla PJ.

 

El rionegrino ya anunció que espera apartar a la ex presidenta a un bloque "Unidad Ciudadana", donde la seguirian Ianni, Anabel Fernández Sagasti (Mendoza), María de los Ángeles Sacnúm (Santa Fe), Ana Claudia Almirón (Corrientes), Marcelo Fuentes (Neuquén) y tal vez María Pilatti de Vergara (Chaco).

 

Si no retiene parte de este grupo, el bloque PJ podría perder la condición de primera minoría, porque Cambiemos garantiza 23 senadores propios y al menos 2 aliados seguros.

 

Con la chapa de bloque mayoritario, podría acceder a muchos beneficios como una segunda banca en el Consejo de la Magistratura, que le garantizaría nombrar y juzgar fiscales a gusto.

El lunes tuvo una señal: el juez  Enrique Lavié Pico avaló la designación del diputado Pablo Tonelli como consejero, elegido por una sociedad entre Cambiemos y otros espacios opositores, ninguno de ellos con el bloque más numeroso de la Cámara. En marzo, con el PJ dividido, Federico Pinedo podría repetir la experiencia, ahora con jurisprudencia a favor. 

 

Además, la victoria, como suele ocurrir, ya abrió el libro de pases de Cambiemos y una de las primeras anotadas sería la fueguina Miriam Boyadjan, hasta ahora leal a Sergio Massa. Esperan lo mismo del salteño Juan Carlos Romero.

 

Para no quedar reducido a una minoría, Pichetto negocia un interbloque amplio junto a los federales (viejos opositores al kirchnerismo) y las fuerzas provinciales, que contra todos los pronósticos el domingo confirmaron su supremacía. Son sectores que ya venían hablando de unirse después de las primarias y ahora les llega la oferta peronista.

 

Se alistan en el primer grupo Carlos Caserio, el chubutense Alfredo Luenzo (leal al victorioso Mario Das Neves), los pampeanos Norma Durango y Daniel Lovera y los puntanos Adolfo Rodríguez Saá y Eugenia Catalfamo. Queda suelta la salteña María Fiore de Viñuales, aliada del golpeado Juan Manuel Urtubey. 

Héctor Luenzo junto al macrista Angelis.

 

Los partidos locales tendrán tres senadores de Santiago del Estero, 2 de Misiones y 2 de Neuquén. "La idea es que haya tres espacios bien marcados. Pero faltan reuniones para cerrarlo", confió a LPO uno de los arquitectos del acuerdo.

 

Claro que no será fácil hacerlo andar desde diciembre. Amparado en el éxito electoral, Rogelio Frigerio podrá aceitar su relación a gobernadores sin proyecto nacional,  históricamente son proclives a ayudar al presidente de turno.

 

Lo supo Cristina Kirchner, que pasó sus 8 años con los votos de santiagueños, misioneros y neuquinos garantizados, aunque ninguno de sus gobernadores era peronista. Tal vez Macri intente imitarla. Y olvidarse por un tiempo de juntar votos en el Congreso.  

Comentá la nota