Enero fue un infierno para los vecinos del barrio Lourdes de Paraná, zona conocida como calle 25 de Junio al final.

Las balaceras mantenían en vilo a todos: como consecuencia un joven resultó gravemente herido en la espalda, y un vecino recibió un balazo una noche cuando salió a tomar fresco, al quedar en medio de un enfrentamiento. Luego de las denuncias, los allanamientos y las detenciones, el viernes el juez de Instrucción Nº 7 Elbio Garzón procesó a seis personas y les dictó la prisión preventiva. Los mayores están en la cárcel, y los menores de edad alojados en instituciones. El barrio, que se había levantado en reclamo de seguridad, ahora está más tranquilo y al menos se puede caminar por la calle, según los vecinos.

Cronología de la violencia

El primer hecho grave se registró el 14 de enero por la noche, cuando pasaron dos jóvenes en una moto por el lugar y desde la casa de una familia de apellido Sánchez recibieron una ráfaga de disparos de arma de fuego. Uno de ellos, de apellido Ledesma, terminó internado en el hospital San martín con un balazo en la espalda. Pese a la gravedad de la herida se logró recuperar y declarar lo que pasó.

El segundo hecho que dejó un herido ocurrió el 18 de enero. Según los fundamentos del procesamiento, fue una balacera que se originó por un enfrentamiento entre un vecino de apellido Monzón y los Sánchez, que viven a tres casas de distancia. En la vivienda de estos últimos estaba Claudio Aguilar (uno de Los Monitos), quien fue a buscar armas para el tiroteo. En ese momento, un hombre de apellido Leiva, que vive en la cuadra, salía a tomar aire, por el calor que no daba tregua en las primeras semanas del año. Pero lo que obtuvo fue un balazo en el brazo, que si bien no puso en peligro su vida lo mantuvo varios días internado. Además, se registraron unos cuatro impactos de bala en la casa de los Monzón.

Por la madrugada la Policía, con orden judicial, allanó la casa de los Sánchez: detuvieron a tres personas e identificaron a ocho más, se practicaron las pruebas de dermotest (para detectar la presencia de pólvora en las manos), de las cuales algunas dieron positivas y otras negativas.

Por el primer episodio del 14 de enero hay dos procesados: Carlos Alfredo Sánchez, de 19 años, y un menor de edad, ambos por el delito de Tentativa de homicidio. Por el segundo hecho de violencia, del 18 de enero, hay cinco acusados: el mismo Sánchez de la balacera anterior, un empleado municipal de apellido Martínez (quien ya cuenta con otras dos causas por delitos iguales), Claudio Aguilar y dos menores de edad, uno de los cuales está alojado en el Centro de Diagnóstico de calle Concordia. Todos ellos también fueron procesados por intento de asesinato y quedaron con prisión preventiva.

En este contexto se iniciaron otras causas: en el momento en que los vecinos cortaron la calle en reclamo de que echen a los violentos del barrio, el 20 de enero en horas de la siesta, el mencionado Martínez habría amenazado con un arma de fuego al presidente de la comisión vecinal, Ricardo Rodríguez. Por esto, se lo imputó por el delito de Amenazas calificadas. Ahora comienza a correr el plazo para que los abogados defensores de los acusados analicen los argumentos del juez Garzón para procesar y mantener en prisión a los acusados y realicen las apelaciones correspondientes.

“La situación se calmó”

Si bien los delitos en la zona de 25 de Junio al final continúan (como los destrozos e intento de robo ayer en la escuela Lourdes), ya no se vive en la violencia inusitada que hubo a principios de año tras las detenciones preventivas de los acusados.

Según informó a diario Uno el presidente de la comisión vecinal, Ricardo Rodríguez, “desde la vez que se levantó el barrio, la situación se calmó”. Por esto destacó el proceder del 911, y dijo: “Estamos esperando la cámara del 911 que nos prometieron, una de las 100 que iban a instalarse en Paraná”.

“La Policía ahora anda más seguido, a comparación de antes no nos podemos quejar”, afirmó el vecinalista.