Santa Rosa sin asfalto y con las cloacas al límite

El intendente electo Luciano di Nápoli aseguró que entre sus grandes desafíos en materia de infraestructura estarán la recuperación de las plantas de asfalto de la Municipalidad y la renovación de las estaciones de bombeo de líquidos cloacales, las cuales, según aseguró, están al borde del colapso.

Di Nápoli dialogó el sábado con Radio Noticias 99.5 durante una hora. En ese tiempo, algunos oyentes formularon consultas, como la de un vecino de Villa Elvina que lleva 25 años esperando que le asfalten su calle. «Con los consorcios de asfalto, el municipio tiene un atraso muy grande. He recorrido barrios que me decían que hace 10, 15 años que terminaron de pagar el asfalto. Hay muchos que se terminaron de pagar en su totalidad y no se ha cumplido», admitió.

Luego brindó un panorama desolador respecto del estado de las plantas de asfalto de la ciudad, tanto la más antigua, como la adquirida durante el gobierno del intendente saliente Leandro Altolaguirre. «Santa Rosa tiene una planta de asfalto vieja, que compró Oscar Jorge (NdR: intendente entre los años 1991 y 2003) que funcionó muchos años, con la que se asfaltaron la mayoría de las cuadras. Esa planta se incendió pero se puede poner en valor y reparar, y habría que hacerlo para que pueda funcionar», explicó.

«Esta gestión saliente decidió comprar una planta nueva que realmente da vergüenza, por eso digo que hay que mostrarla. Es una planta pero es de mala calidad, está mal armada, no funcionó nunca más de 24 horas seguidas, está mal estructurada desde el lugar donde fue armada. Y nunca funcionó. Y encima se la compraron a una empresa que a poco de comprarla y venir a armarla, se fundió, con lo cual la máquina está en garantía pero no hay a quién reclamarle», sostuvo.

Por ese motivo, cada vez que la ciudad necesita realizar obras de bacheos compra el material en la ciudad de Pigüé, provincia de Buenos Aires.

Cloacas.

En cuanto al sistema de agua potable y cloacas, Di Nápoli aseguró que la manera de solucionarlo es con conocimiento técnico y con un Plan Director de obras. En cuanto a esto último, volvió a cargar contra la gestión saliente. «Es otra de las promesas incumplidas de Cambiemos», dijo.

-¿Cuánto tiempo más llevará?

-Aventurar un tiempo, hablar de cuatro años o de ocho años, no se sabe porque falta justamente ese Plan y falta una planificación seria, es muy difícil decirte. Sí te puedo decir que el problema se puede empezar a solucionar en cuatro años, porque se pueden hace cinco obras en cuatro años, porque son obras fundamentales y si bien no está el Plan Director, sí hay obras planificadas que sabemos que van a estar. Por ejemplo, el trasvase de la laguna; la reparación de las estaciones de bombeo (de líquidos), que son el corazón de nuestro sistema cloacal y están a punto de colapsar.

-¿Podrían colapsar?

-Las estaciones están en muy malas condiciones y los caños centrales, las arterias de ese sistema, están realmente muy deteriorados. Eso ya hay proyectos que ha elaborado la provincia, que hay que ponerlos en ejecución. Empezar a solucionar el problema. No es sencillo y va a llevar tiempo. Toquemos madera que no lluevan muchos milímetros de golpe, porque no están las obras finalizadas» del trasvase de agua de la laguna al Bajo Giuliani.

Dagsa.

El otro punto que trató Di Nápoli, directamente ligado con la crisis sanitaria de la ciudad, fue el de los trabajadores de la Dirección de Agua y Saneamiento (Dagsa). Altolaguirre impulsó en los últimos días de su mandato la aprobación de una ordenanza para reconvertir esa repartición en un ente, al estilo del Emhsu. La iniciativa fue impulsada también por el gremio Sipos. Además del ente, el gobierno saliente y el gremio de obras sanitarias firmaron un acta paritaria por la cual lograron un nuevo acuerdo salarial, aparte del de la Ley 643, con el respaldo de la Subsecretaría de Trabajo de la provincia.

«La verdad que el servicio de Dagsa, es un área muy sensible, y es cierto que los trabajadores del área han estado muy complicados, muy postergados, lo hemos dicho y queremos reafirmarlo. A 15 días de irse, Altolaguirre en conjunto con uno de los gremios, no con todos, con uno, que es el Sipos, hizo un convenio colectivo y lo dispuso; pretendieron la creación de un ente autárquico con presupuesto propio, como funciona el Emhsu, y un convenio colectivo dentro de ese mismo ente. Un convenio colectivo que hay que ver sobre todo el costo financiero, cuánto va a salir. Nosotros tenemos un cálculo que hizo nuestra gente de Hacienda, y la verdad que así como está no se puede afrontar», dijo.

«El lugar para discutir este tema es el ámbito de la paritaria, sentarnos con todos los gremios, UPCN, ATE, SOEM, Sipos, todos los que tienen afiliados en este sector de la Municipalidad, a discutir un convenio específico. El tema del Ente hay que discutirlo muy a fondo, porque no se pueden en cada uno de los servicios del municipio crear un Ente; porque un ente funciona bien pero es costoso y tiene cálculos financieros que exceden. No se puede gobernar la ciudad en base a Entes», concluyó.

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