Ezequiel de apenas 22 años y mucho potencial boxístico, viajó el lunes pasado con su entrenador a Inglaterra para enfrentar al séptimo en el Ranking Mundial y campeón invicto Liam Smith, quien buscará durante el corriente año una pelea por el titulo mundial.

Con el himno Argentino de fondo, la bandera argentina a modo de capa y la camiseta del Club Deportivo Alsina, Romero hizo su ingreso al sector del cuadrilátero saludando y besando la bandera ante un clima hostil ya que su contrincante es oriundo de la ciudad de Liverpool.

Durante los primeros round, Ezequiel fue punzante y preocupó con sus golpes al rincón local y al propio Smith que no podía detenerlo. Luego recibió un golpe bajo y a partir de ese momento el Ingles fue encontrando su distancia mas cómoda, llevándolo al centro del ring a cruzar golpes.

El quiebre de la pelea se da cuando el argentino cayó a la lona por un derechazo directo a la mandíbula y poco después un golpe al hígado que lo obligó a arrodillarse del dolor. Guapo, Ezequiel siguió adelante intentando con coraje revertir la situación pero Smith con su experiencia manejó los tiempos y esperó el momento para otro golpe preciso al cuerpo, que precipitó el final.

El árbitro atinadamente decidió dar por terminado el combate, Liam Smith ganó en el séptimo round por Nocaut técnico.

 

Más tarde en su facebook, Ezequiel escribió: “Bueno gente deje todo pero no pudo ser lamentablemente fui muy bien superado, felicito a mi rival que hizo un excelente laburo… Los espero en Ezeiza a pesar d la derrota jajaja”.

Sin duda esta fue una de las peleas más importantes a las que ha llegado un boxeador baraderense, algo que es orgullo para todos. Romerito hizo flamear la celeste y blanca en el corazón de Inglaterra mientras se escuchaba de fondo el Himno Nacional, un ejemplo de amor a su tierra.

Hay mucho camino por recorrer y mucho por aprender pero Ezequiel tiene todo seguir creciendo dentro de este difícil y apasionante deporte.

 

La pelea según la prensa inglesa

El sitió de Liverpool, http://www.liverpoolecho.co.uk, publicó la siguiente nota minutos después de la pelea la cual hemos traducido en sus fragmentos mas destacados.

Liam Smith ganó el título súper welter intercontinental vacante de la OMB con una excelente performance sobre el Argentino David Ezequiel Romero, esta noche en el Echo Arena.

El visitante, luchando fuera de su tierra natal por primera vez, mostró corazón y valentía después de recuperarse de cuatro caídas pesadas.

A pesar de la naturaleza unilateral, Romero comenzó característicamente fuerte – algo Smith comentó antes de la pelea. El sur de Estados Unidos no puede ser acusado de rehuir el reto cuando llegó con la intención de luchar mano a eso, y que lo hizo.

Los primeros minutos fueron desordenados con Romero lanzando violentamente, logrando atrapar Beefy temprano. La primera ronda fue difícil para Smith, pero eso es lo más cerca que llegó.

Smith recuperó el control absoluto en el segundo round, alcanzó a Romero en tres ocasiones con gancho ascendente de derecha a tiempo antes de que un combo-izquierda-derecha-izquierda terminó ganando el round.

El tercer round fue todo Smith que estaba exhibiendo un excelente trabajo defensivo. Un enorme gancho de izquierda al cuerpo que envió ondas de choque a través de Romero y en última instancia, lo que le obligó a caer de rodillas, pero el árbitro estableció que el golpe fue por debajo del cinturón.

Una sólida cuarta ronda mostró a Smith controlar los tres minutos, trabajando continuamente el cuerpo – una táctica que estaba pagando dividendos con Romero.

Beefy subió la lucha en el quinto con un despliegue espectacular, aplanando al argentino con un uppercut de izquierda que aterrizó maravillosamente. Sorprendentemente Romero tuvo un recuento de nueve y decidió volver por más, una segunda caída llegó un minuto después .

En el sexto, Smith continuó su incansable búsqueda de un golpe de gracia, hubo una cuarta caída con un gancho de izquierda excelente sobre el cuerpo, pero he aquí que, el duro argentino quería más. Notable, aunque un poco mal aconsejado.

Con la campana que suena en la séptima ronda, que era sin duda sólo una cuestión de tiempo y, finalmente, el árbitro lo vio sentido y detuvo la pelea mucho después de la esquina debería haber tirado la toalla, Romero no tenía nada más que ofrecer. Lo de Smith fue sensacional.