Rojas dijo ser inocente del crimen de Leda, pero no de su violento secuestro

Rojas dijo ser inocente del crimen de Leda, pero no de su violento secuestro
Subrayó que también fue víctima, porque lo pusieron de rodillas y de espaldas a la docente. Se vienen los careos con Pereyra y Brandán.
El ex novio de Leda Fabiana Raimundi declaró ayer nuevamente ante la Justicia, ocasión en que se habría considerado “inocente de su asesinato”.

Así lo manifestó a los periodistas el abogado de Mario Rojas, doctor Enrique Crespín, quien lo asistió entre las 11 y 13.30 en que transcurrió la ampliación de indagatoria.

Visiblemente delgado, Rojas fue trasladado por personal del Penal de Varones, esposado y bien custodiado.

“Mi cliente dejó en claro ante el juez que estuvo sometido”, mientras los otros cuatro detenidos mantenían cautiva a la maestra jardinera.

Otros detenidos

Los restantes son Guillermo “El Turco” Pereyra, Gabriel Brandán, Lucrecia y su hijo Luis Esteban Ledesma.

Rojas habría manifestado al juez Ramón Gómez “que no vio quién asesinó” a Leda, ya que él permanecía de espaldas y de rodillas.

De acuerdo con el expediente, con algo filoso en el cuello Luis Esteban le habría obligado a darse vuelta y no ver, mientras la víctima era golpeada.

“Yo les pedía que no le hagan nada, pero ellos me apartaron. Sentía que algo le hacían porque se quejaba y después ya no se la escuchó más”, habría señalado Rojas al magistrado en su primera versión.

Ayer retornó y el juez lo notificó sobre la ampliación de pruebas, destacándose testimonios e informes telefónicos, incluido el suyo.

“La prueba genética no lo vincula y eso es muy importante”, acotó Crespín.

Negativas

A criterio del letrado, “Rojas no declaró nada en aquello que se considera contradictorio, según los otros testimonios de los detenidos”.

¿Él supo que Leda había sido asesinada esa noche? -¿A quién atribuyó su muerte?, fueron los interrogantes colectivos.

“Él no vio quién mató a Leda”, respondió Crespín.

“Se declaró inocente de su crimen, pero reconoció todo lo que se sabe del encuentro con la víctima las horas previas y en su automóvil”, acotó el letrado.

-¿Cuándo descubrió que la mujer había muerto?, partió una nueva pregunta.

“Él lo supo al día siguiente”, afirmó Crespín.

Fue el 15 de junio. A las 9.30 arribó la policía, pero no pudo ingresar a su casa. a las 12.40 la allanó y lo aprehendió, por orden de la Justicia.

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