Roca y Cervantes tiran al río los líquidos cloacales sin tratar

Roca y Cervantes tiran al río los líquidos cloacales sin tratar

Lo reconocieron el DPA y ARSA, en el marco de la causa judicial abierta por el amparo ambiental presentado por el Municipio de Roca en enero.

 

Tanto el Departamento Provincial de Aguas (DPA) como la empresa Aguas Rionegrinas (ARSA) admitieron, ante la justicia, que las plantas de tratamiento de residuos cloacales funcionan en forma deficiente en la zona y tanto en Roca como Cervantes, llegan los líquidos crudos al río Negro.

Esto surge de los informes que tanto el organismo provincial como ARSA presentaron ante los requerimientos judiciales tras el amparo ambiental que presentó el enero el municipio de Roca.

Sobre el colector P5, el DPA indicó que no sólo se “encontraba con muy mal aspecto visual y mala calidad”, según el último relevamiento que efectuó el organismo, sino que presentaba “una alta concentración de Escherichia coli, debido al aporte continuo de cloacales crudos en la intersección de las calles Jujuy y Perú”.

“Muy malas condiciones por el rebalse histórico de cloacales a la altura de barrio Brentana”, puntualizó, haciendo referencia a un “alto valor” de la bacteria, trascendió.

En el mismo informe se cita a los estudios realizados en el zanjón Hoffmeyer de Cervantes. Si bien se reconoce que la localidad “descarga sus efluentes crudos al colector” se enfatiza en que la calidad del mismo no varía respecto al último punto del monitoreo. Exclusivamente lo atribuyen a “que las totoras que han ido creciendo actúan como filtros fitoterrestres, depurando las aguas” y se reporta presencia de Escherichia coli “aunque muy baja”.

Capacidad vencida

En tanto, ARSA expuso que las lagunas que fueron construidas en Roca en el 2004 ya tienen vencida su capacidad de caudal a tratar. A eso, detallaron, “se le debe sumar que el interconexionado de las mismas también disminuye la eficiencia del sistema de tratamiento” y finalmente se reconoce que “el sistema de tratamiento de líquidos cloacales de la ciudad de General Roca es muy deficiente a la fecha”.

No existe aún ninguna acción judicial que frene el vertido.

En el amparo el municipio había solicitado dos medidas cautelares: una para que una consultora independiente realice un estudio para determinar el nivel de contaminación del río. Ese pedido fue tomado en cuenta, pero también se había solicitado otra medida cautelar, para que se ordene a ARSA y al DPA “el cese inmediato del vertido de líquidos cloacales en el río Negro”.

Sin embargo, la jueza dispuso no hacer lugar “por el momento”, considerando que el pedido coincide con el objeto “de fondo” del amparo.

Esta última disposición motivó un recurso de reconsideración que fue rechazado por la jueza de Feria, Laura Fontana, quien sostuvo que hacer lugar a la cautelar sería dar “un anticipo” de lo que corresponda decidir en la sentencia final.

Contra ese rechazo, los amparistas interpusieron una apelación, que fue denegada el 16 de marzo por el Superior Tribunal de Justicia –confirmando lo dispuesto en primera instancia– con el mismo argumento de la jueza respecto del adelanto de la cuestión de fondo.

En números2.400NMP/100 ml (número más probable en 100 ml de agua) de coliformes fecales hay donde descargan las cloacas en Roca.2.000NMP/100 ml es el número máximo admitido para el vuelco de colectores pluviales, según los parámetros del DPA.

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