Ricardo Jaime y su ex esposa declaran en indagatoria

Ricardo Jaime y su ex esposa declaran en indagatoria
Silvia Reyss, ex pareja de quien fuera secretario de Transporte del kirchnerismo tiene que presentarse hoy en Tribunales para declarar como imputada de ser testaferro del ex funcionario quien, a su vez, tiene que responder por otros dos casos por corrupción
Ricardo Jaime estuvo en pareja con Silvia Reyss desde antes de que sus fortunas aumentaran de manera significativa. Separados ambos, tres hijos cada uno, convivieron durante muchos años, especialmente aquellos en los que Jaime y los suyos cambiaron de manera notable su nivel de vida. Autos, casas en countries, departamentos, una lancha, viajes, y otros bienes se incorporaron al círculo familiar al tiempo que Jaime repartía millones de pesos en subsidios y decidía a qué empresas beneficiaba con los contratos de obra pública de infraestructura de transporte.

Fueron años de acumulación y, como Jaime no podía poner las cosas a su nombre, utilizó a otras personas para que oficiaran como testaferros. Entre ellos están Reyss y sus hijas Agostina y Lorena Jayo. Las tres tienen que presentarse ante el juez Sebastián Casanello y el fiscal Carlos Rívolo quienes están a cargo del expediente por enriquecimiento ilícito contra el ex secretario de Transporte de los primeros seis años de la década kirchnerista.

Las tres mujeres tenían los mismos abogados hasta hace poco tiempo, pero los letrados renunciaron y ellas optaron porque las represente un defensor oficial. Hoy-siempre que no haya alguna chicana de último momento- deben declarar ante Casanello y Rívolo. En la causa judicial se demostró que las tres juntas formaron Alosi S.A. (Agostina- Lorena- Silvia) para explotar el spa Alleviare en Córdoba. Pero además, Agostina compró y luego vendió un Fiat, adquirió la mitad de un terreno en Mendiolaza –Córdoba–, compró acciones de Alosi, ejecutó un plazo fijo y se hizo con un Peugeot.

La Justicia le pidió explicaciones por 179.916 pesos. A Lorena Jayo la Justicia le pidió que demostrara cómo consiguió 354 892 pesos, porque entre 2005 y 2009 compró y vendió un Volkswagen Golf, puso dinero en un plazo fijo, adquirió y luego vendió una parte de un departamento de Río Gallegos –Santa Cruz–, compró y luego vendió un Fiat y un Mercedes Benz Sprinter, adquirió la mitad de un terreno en Mendiolaza y también un lote en Santa Rosa de Calamuchita; como si esto fuera poco, también compró una moto BMW –como las que le gustan a Jaime–, acciones de Alosi y dos autos más. Quien más dinero tuvo que justificar fue Reyss, docente jubilada que adujo que tenía trabajo en una empresa llamada Idemark S.A. y así pudo explicar algunos ingresos.

En 2003, Reyss poseía dos autos y una casa en Río Gallegos. Pero al inicio de la recaudación de su pareja vendió los dos autos viejos y compró un Peugeot, una embarcación, un departamento en Río Gallegos, una casa en el country cordobés Cuatro Hojas, otro Peugeot más, y suscribió y vendió las acciones de Alosi S.A.; luego, vendió los dos Peugeot y el barquito, y compró un auto Honda y un departamento en Florianópolis, Brasil, por 639.648 pesos –en 2010 señó otro departamento en el mismo edificio de la costa brasileña–. La suma de lo que tenía que justificar era de 1.065. 863 pesos. La Justicia consiguió pruebas de que sus ingresos, desde 2003 a 2010, sumaron algo más de 740.000 pesos.

Las cuentas de Jaime y sus testaferros fueron sometidas a un peritaje que determinó que no pueden justificar cómo lograron comprar todos los bienes que fueron descubiertos. Y por eso Casanello los llamó a indagatoria.

Jaime en tanto tendrá que presentarse pero por otros dos casos de corrupción. Se lo acusa de haber utilizado para su beneficio personal dos autos que estaban destinados al Estado. Uno fue aportado por una empresa que hizo una obra pública bajo la órbita de Jaime. Pero el ex secretario de Transporte lo usaba como si fuera propio. El otro auto fue entregado por una concesionaria de un corredor vial para que el Órgano de Control de Concesiones Viales (OCCOVI) lo utilizara en la supervisión del mantenimiento de la autopista. Sin embargo el auto era usado por Jaime para sus tareas diarias y para pasear los fines de semana. Por esa causa también está imputado el ex director de OCCOVI, Claudio Uberti quien deberá presentarse a declara el lunes próximo.

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