Uno de los técnicos de mayor confianza de Sergio Massa, consideró que el próximo gobierno deberá conseguir dólares desde distintas fuentes para tener cierto margen de maniobra a partir del 10 de diciembre. "Nosotros planteamos que hay que salir del cepo cambiario, pero en forma gradual para evitar errores".

Y explicó que será imprescindible que el nuevo equipo económico consiga u$s 10.000 millones de arranque: "Puede venir una parte del campo, otra de organismos internacional y de los propios argentinos que tienen dólares en caja de seguridad".

Uno de los dilemas que se le presentan a Mauricio Macri para su asunción es cómo cumplir con la promesa de abrir el cepo y al mismo tiempo evitar que se descontrole el tipo de cambio. "A fin de año se producirá una fuerte emisión de pesos para cubrir el rojo del Tesoro. Si un Banco Central con poder de fuego es muy riesgoso sacar las restricciones del tipo de cambio", señaló Delgado.

“NO SE PUEDE LIBERAR EL CEPO CAMBIARIO SI EL CENTRAL NO RECUPERA PODER DE FUEGO”, CONSIDERÓ DELGADO

Uno de los sectores que podría colaborar en forma más decidida en esta etapa es el campo: "Hace un año las cerealeras liquidaban unos 70 millones de dólares diarios. Ahora apenas 20 millones porque están esperando al futuro gobierno. Hay que trabajar muy rápido para que entren esos dólares que están en silobolsa".

Para eso, consideró, será necesario reconocer un dólar más alto y reglas de juego clara en materia impositiva para el sector. "Está bien que no se implemente una suspensión de retenciones por 90 días para acelerar la liquidación de divisas, porque es injusto para los productores que ya vendieron".

-¿Cómo imagina el arranque de la gestión de Mauricio Macri?

-Estos años hicimos todo al revés, será fundamental recrear la confianza. Lo que se haga en los primeros 120 días es fundamental. Si se toman medidas bien diseñadas puede ser reactivante, dentro de un marco de reformas. Y también defendemos la idea de un consejo económico social, para que el Estado, empresarios y sindicatos asuman un compromiso que permita acompañar en la baja de la inflación, que es la culpable de la presión cambiaria que estamos viviendo.

Estamos en las puertas de un período complejo, porque el gobierno prácticamente no encontrará reservas en el Central, seguirá la demanda de dólar ahorro en los primeros días de diciembre y habrá fuerte presión para emitir pesos a fin de año. Si se maneja bien esta situación podrá atravesarse mejor el primer trimestre. A partir de abril todo es un poco más fácil porque empiezan a llegar los dólares de la cosecha gruesa.