Según se informó desde el bloque Cambiemos: “Los argumentos centrales del rechazo fueron esgrimidos por los concejales de ese espacio, quienes fundamentaron su exposición en el déficit primario del Municipio, que año a año aumenta su deuda, la propia deuda con Cevige -con quien además tendría acreencias- en un proceso nada claro, los desmanejos de los procesos de compra, cuyo ejemplo más palmario está en la justicia, y se trata de la denuncia del proveedor Santiago Rincón, quien demostró a través de audios grabados la existencia de reuniones de gabinete para ‘armar’ procesos de pagos”.

Mientras que durante la sesión el grueso de las críticas estuvo a cargo de las ediles Eugenia Grinspun y Rosa Estanga, quienes -entre otros aspectos- cuestionaron: “una doble imposición del asfaltado de la avenida 27, que tuvo giros provinciales para su pavimentación en el año 2016/17, y ahora se pagará con contribución de mejoras”.

Además, las referentes de Cambiemos pusieron en consideración “los exorbitantes gastos de reparación de un utilitario, y el siempre impreciso manejo de los fondos que la Provincia gira año a año para educación, que a juicio de Cambiemos no se ve reflejado en los edificios escolares de Villa Gesell”.