A fines de octubre, cuando el Concejo Deliberante llevaba un mes sin sesionar por la negativa del gobierno de Arroyo de reencasillar a los empleados del cuerpo, Unidad Ciudadana lanzó la propuesta: ante la “preocupante situación institucional” y la “intromisión” del Ejecutivo en las decisiones del poder legislativo solicitó la interpelación del jefe comunal.

El proyecto fue considerado en una reunión de presidentes de bloque y quedó en ese momento desestimado. Pero luego de la presentación del Ejecutivo ante la Suprema Corte contra la medida que restableció la bonificación de los docentes municipales la iniciativa resurgió. “Respetamos a rajatabla la institucionalidad. En ese marco, la interpelación del intendente es una herramienta institucional y creemos que es el momento de utilizarla”, dijo a LA CAPITAL el jefe del bloque de Unidad Ciudadana, Daniel Rodríguez.

“Todo lo que está sucediendo en el municipio amerita que el intendente dé explicaciones ante el Concejo. Ya no alcanza con que lo hagan sus funcionarios”, agregó Rodríguez en alusión a la interpelación de los secretarios de Hacienda, Hernán Mourelle, y Educación, Luis Distefano, que se realizó a principios de diciembre y concluyó con la reinstauración de la bonificación docente vetada por Arroyo.

Rodríguez no solo hizo alusión a ese asunto. Dijo que la presencia de Arroyo en el recinto es importante por la cantidad de conflictos que enfrenta la administración a las puertas de la temporada. “Ni siquiera está resuelto lo que va a pasar con los guardavidas”, apuntó.

No es una idea privativa del kirchnerismo. Ariel Ciano, del Frente Renovador, había advertido en la interpelación de Mourelle y Distefano que si el gobierno mantenía el rumbo erróneo que llevaba iba a ser necesario que Arroyo diera explicaciones. “Y con esta decisión de recurrir a la Suprema Corte claramente están ratificando ese rumbo, por eso planteamos la necesidad de que Arroyo venga a dar explicaciones al Concejo”, agregó.

La idea aún no impregnó en otras bancadas. Claudia Rodríguez, de Acción Marplatense, cuestionó la decisión de recurrir a la Suprema Corte pero no se sumó a la moción interpeladora: “Esto que hizo el Ejecutivo no aporta nada positivo. Pero estamos cerca de la temporada y queremos aportar paz y tranquilidad, no alterar aún más los ánimos”.

En el radicalismo ven la gestión de Arroyo cada vez con peores ojos. “Estamos muy preocupados por la paralización de las actividades del municipio, pero por el momento no estamos pensando en una interpelación del intendente”, aseguró una alta fuente del bloque.