Esto marca a las claras un contundente apoyo popular al cambio político que se reclamaba desde diferentes estratos sociales. Además, el Intendente obtuvo una importante aprobación de la ciudadanía hacia su gestión de Gobierno.

RIO GRANDE.- El intendente Gustavo Melella fue, a la luz del resultado electoral de las últimas elecciones municipales y provinciales, el candidato con mayor respaldo ciudadano de ésta ciudad, con un porcentaje de votos casi sin precedentes.

De esta manera, el ahora intendente electo por FORJA, reasumirá en diciembre el más alto cargo electivo del Municipio, con un consenso comunitario, no solo de los vecinos sino también de las fuerzas y agrupaciones políticas, gremiales e institucionales locales.

El profesor Gustavo Melella llega, incluso, con más sustento político y respaldo popular que la propia gobernadora electa Rosana Bertone, salvando las distancias. Así lo confirma el casi 54 por ciento de los votos conseguidos. Ese porcentaje traducido en números equivale a 25.756 sufragios, que es prácticamente el doble del obtenido en los comicios de 2011 cuando llegó al Ejecutivo municipal (12.917 votos).

En el mismo sentido, el caudal de votos registrados la semana pasada supera largamente al obtenido por los distintos partidos a cargos legislativos, tanto comunales como provinciales y superior en más del doble en el caso del flamante Intendente de la capital fueguina.

Desde ese punto de vista, estas elecciones no han hecho más que ratificar el crecimiento de un camino tan ascendente como modesto, si se tiene en cuenta que quien hoy ha sido reelecto intendente fue en sus comienzos un empleado municipal más.

Lo descripto más otras consideraciones que se harán más adelante, marca a las claras un contundente apoyo popular al cambio político que se reclamaba desde diferentes estratos sociales. Esto colocó a Gustavo Melella como la figura política que mayor apoyo recibió desde las urnas, y lo coloca no sólo como el máximo referente provincial de FORJA, sino que además lo ubica como el nuevo referente en la ciudad de Río Grande del proyecto nacional que impulsa el Frente Para la Victoria en todo el país (reconocido por varios de los mejores intérpretes kirchneristas), y que este año tuvo también un respaldo histórico del electorado más austral del continente.

Aprobación del electorado

Los números de las urnas del domingo 21 de junio duplicaron las cifras de las de hace cuatro años. Y la razón excede a factores como la campaña o la publicidad proselitista. Centralizar los motivos en esos aspectos sería faltar a la verdad y subestimar al vecino.

Justamente en cada uno de los tres años y medios que lleva la gestión municipal de Gustavo Melella, están las razones de los números que arrojaron las urnas.

Las obras de infraestructura y salud; las acciones en deportes, cultura, educación, empleo, asuntos sociales y sobre todo en temas cruciales como el acceso a la tierra y la vivienda, entre otras muchísimas realizaciones, en todos los sectores y barrios de la ciudad, explican la contundencia del pronunciamiento del votante.

Fuerte respaldo

Gustavo Melella no solo fue el candidato de la gente. También lo fue de otros partidos políticos, además de FORJA, que él mismo fundó en Río Grande hace apenas cinco meses, como el Frente Para la Victoria, el Partido Arraigo y Renovación y el Espacio Democrátco Para la Victoria (Nuevo Encuentro), que lo llevaron como candidato a intendente.

Eso sumado al respaldo y apoyo público de un sector de la Unión Cívica Radical (Lista 3 de Paulino Rossi), numerosas entidades sindicales y centrales obreras como la CTA y otras agrupaciones que por los vertiginosos vencimientos de los plazos no pudieron formalizar su candidatura. Tras las elecciones, los festejos propios y ajenos también lo ubicaron en la primera fila de las consideraciones que replicaron los medios nacionales.

Esa adhesión es la que finalmente se reflejó en las urnas mostrando un electorado cada vez menos fragmentado que con claridad expresó su preferencia a la hora de confiar los destinos de la Ciudad y proyecta el surgimiento de una nueva figura política que ya a comenzado a trascender fronteras.