Magdalena Acuña era hasta la mañana de este miércoles la subsecretaria de Innovación y Experiencia Ciudadana bonaerense, dependiente del ministerio de Gobierno que comanda Joaquín De la Torre desde diciembre. No le aprobaron el presupuesto para un proyecto y terminó pegando el portazo, aunque el final era anunciado, teniendo en cuenta que había sufrido un recorte en su estructura, producto de los cambios de gabinete dispuestos por María Eugenia Vidal.

Según pudo saber Letra P, el portazo lo pegó esta mañana, producto de la reprobación a un presupuesto que había pedido, destinado a proyectos de atención ciudadana: estaciones de trámites, centro de gestión y participación ciudadana. Algo parecido a lo que supo hacer el kirchnerismo, con oficinas móviles para, por ejemplo, tramitar el DNI.

Acuña antes fue subsecretaria de Modernización, cuando estaba dentro del novedoso ministerio de Coordinación y Gestión que comandó Roberto Gigante. Pero antes de que el funcionario pase a Infraestructura para reemplazar al renunciante Edgardo Cenzón, esa área se desmanteló y Acuña terminó en Gobierno -hasta ese momento con Federico Salvai como jefe-. Allí se transformó en subsecretaria de Innovación y Experiencia Ciudadana.

"Tenía una gran estructura y se la desarmaron toda; en este último tiempo venía mal, le cortaron las alas", le dijo a este portal una fuente cercana a Gobernación. El punto final se produjo este miércoles, tras un cortocircuito con De la Torre.

Magdalena es hermana de Soledad Acuña, la ministra de Educación porteña de Horacio Rodríguez Larreta. En marzo del año pasado, había destacado en un acto que el plan implementado desde el 10 de diciembre de 2015, la subsecretaría que ella comandaba tenía "tres ejes de gestión: modernización administrativa; infraestructura tecnológica; e innovación y participación ciudadana. Tenemos el enorme desafío de hacer que los vecinos de la provincia de Buenos Aires sientan que hay un Estado eficiente, que les da respuestas cuando lo necesitan".

Acuña resaltó en aquel momento el “importante cambio en la estructura de la Subsecretaría” que fue traspasada al Ministerio de Coordinación y Gestión Pública “para poder responder a cada uno de los aspectos que implica la modernización de la Administración Pública”, y darle al vecino “soluciones y no problemas”. Meses después pasó a Gobierno y ahora terminó renunciando.