La tarea implicará la destrucción de la parte central del pavimento para poder excavar y llegar hasta los viejos caños que, según se estima, tienen cerca de un siglo. Tal es el deterioro que presentan, que el la capacidad de suministro se ha reducido en los últimos años, según las autoridades.

Los sedimentos acumulados bloquean el paso del agua. En algunas viviendas apenas sale un hilo de agua. El problema recrudece en el verano y desata las protestas.

Inconvenientes

Los trabajos repercutirán en el tránsito. “Sin dudas vamos a tener una circulación caótica, complicada durante un tiempo porque en las calles en las que haya que trabajar tendremos que habilitar apenas media calzada” advirtió el intendente Osvaldo Morelli. “Hay complicaciones de todo tipo” insistió.

El proyecto se instrumentará a través del programa nacional “Más Cerca” y prevé una inversión de $3,6 millones. La empresa a cargo de las obra es privada. Los trabajos avanzarán de oeste a este desde la calle La Madrid (continuación de la Belgrano) por España, por 24 de Setiembre y por Italia hasta las vías del ferrocarril. En ese sector viven unas 1.500 familias que serán beneficiadas con el nuevo servicio.

Morelli admitió que la obra venía siendo postergada por las complicaciones que demanda su ejecución. “No solo hay que renovar la cañería central, sino también la que conecta con las viviendas de cada uno de los usuarios”, comentó. La constructora no solo debe reinstalar la cañería, sino además repavimentar las calles que serán excavadas.

“Sabemos que vamos a vivir días de ruidos y complicaciones en el tránsito, pero es una obra importante. A veces no podíamos bañarnos por la falta de agua. El que no tiene una bomba para reforzar la salida del agua sufre penurias, principalmente en el verano” comentó la vecina María Gómez, de la calle 24 de Septiembre. 

La obra es encarada por el municipio local, la SAT y la Secretaría de Obras Públicas de la Nación. Se estimó que a principio del año próximo los trabajos estarán terminados.