Emilio Monzó acercó a Jorge Remes Lenicov al armado de un espacio de centro que busca quitar a Mauricio Macri de la carrera y apoyar a Horacio Rodríguez Larreta para 2023.

 

El ex titular de Diputados avanza en este armado con Martín Lousteau, con quien se solía reunir semanalmente desde antes de la cuarentena en las oficinas que tiene el senador en calle Costa Rica, en Palermo Sensible o Villa Freud, una zona llamada así por los numerosos consultorios de psicólogos que hay en el vecindario.

 

Este grupo sumó el consejo de Remes, el primer ministro de Economía que devaluó la moneda actual y terminó con la ley de convertibilidad en los primeros días de 2002, durante el gobierno de Eduardo Duhalde.

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Días atrás, Remes les diagnosticó que el gran desafío del sistema político argentino es ir al centro porque, según sostiene, las dos fuerzas más importantes del país están conducidas por los extremos. 

Remes dijo que Alberto se dedicó a gestionar y no liderar el peronismo, que sigue detrás de Cristina, y que la prueba de supervivencia de Cambiemos es abandonar la intransigencia de Macri y Patricia Bullrich y darle el lugar a los Larreta, los Monzó y los Lousteau.

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"Remes está ayudando sin comprometerse", aseguraron a este medio en el espacio y señalan que el ex ministro pide respetar las leyes de la economía "desde el peronismo".

 

El socio máximo que tiene Monzó en esta nueva aventura es Rogelio Frigerio. Ambos hicieron tándem durante los cuatro años que gobernó Macri, en los que Monzó decía las cosas que Frigerio no podía decir como ministro. "Rogelio habla en inglés y Emilio en español, pero dicen lo mismo", grafican las fuentes.

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Larreta, que ya le había dado lugar a Monzó y a Frigerio en su gabinete, está al tanto de estos movimientos y los avala. "Larreta tiene dos sistemas operativos, si tiene que adaptarse a las boludeces del PRO lo hace, y si tiene que embarrarse con el peronismo y los radicales también", aseguran a LPO fuentes al tanto de las negociaciones.

 

Larreta convirtió a su rival histórico Lousteau en socio y negocia con él en el día a día. La semana pasada el senador le dio los votos para aprobar la ley de emergencia económica en la Legislatura. La ley también la votó Sergio Abrevaya, del GEN de Margarita Stolbizer, una de las dirigentes que Monzó quiere sumar al armado de centro. Por eso tendió puentes con Marcelo "Oso" Díaz, el histórico referente de Margarita en la Legislatura bonaerense a quien busca meter en el Congreso.

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María Eugenia Vidal, en tanto, es la opción "tapón" que tiene Larreta si decide impedir que Lousteau le arrebate la Ciudad en 2023, pero al mismo tiempo, la carta que puede jugar el jefe de gobierno en la provincia si se lanza a la competencia presidencial.

 

La ex gobernadora está parada en el medio de la General Paz por pedido de su jefe político y distanciada de Macri. No así del resto de Cambiemos: por estas horas trata que los radicales que la respaldaron a través de su vice Daniel Salvador durante su mandato, no se escapen con Gustavo Posse, que como explicó LPO ya arrancó la huida del PRO en la provincia.

 

Los radicales mantienen su propia guerra de zooms, en la que las batallas se ganan por la cantidad de asistentes a las videollamadas que consigue cada bando. En esa guerra, el eje Cornejo-Nosiglia pugna contra Morales-Negri. Lo que tienen en común es que no lo quieren a Macri como candidato para 2023.