La reconstrucción del Borda, otra muestra de que el amor vence al odio

La reconstrucción del Borda, otra muestra de que el amor vence al odio
El avance de la Policía Metropolitana sobre el predio del Borda sólo generó destrucción y dolor. Pero jóvenes, médicos y vecinos apuestan al compromiso y trabajan a destajo para reconstruir el espacio. Donaciones y voluntarios animan el operativo recuperación. Emotivos relatos con INFOnews.
Por:

Cecilia Toledo

Las mismas chapas que la Policía Metropolitana utilizó para vallar el predio del Taller Protegido 19 del Hospital Borda, como canalizadores del avance represivo sobre médicos, pacientes y vecinos, son hoy las nuevas paredes del taller en reconstrucción.

El 1 de mayo, cuando se supone que los trabajadores descansan, en el Borda hacían honor al día del laburante: profesionales y jóvenes comenzaron organizar un pañol donde se fueron colocando las máquinas de producción que utilizan los pacientes en el taller.

Jóvenes apuestan a la reconstrucción del espacio

Jóvenes apuestan a la reconstrucción del espacio

“Ahora vamos por el armado de un inventario, el rescate de herramientas y el movimiento de los escombros. Más tarde llegará la puesta en funcionamiento de los talleres de carpintería, herrería y pintura. Nos reunimos todos los sábados a la mañana”, contó a INFOnews Ricardo Talavera delegado de ATE y trabajador de los talleres protegidos.

La idea de llenar de vida el predio arrasado por la violencia de la Metropolitana surgió de la comisión interna de los trabajadores, quienes tomaron nota de la cantidad de jóvenes que espontáneamente se acercaron para defender el taller protegido, y decidieron reconstruir el espacio. Desde entonces, las intenciones para colaborar no cesaron. “Recibimos propuestas de donaciones en dinero, se acercó gente dispuesta a organizar festivales, campañas solidarias, y hasta desde la agrupación de Milagro Sala ofrecieron mano de obra”, cuenta el operador terapéutico.

“Genera una emoción enorme ver cómo jóvenes y vecinos se acercan para poner en funcionamiento el taller. El trabajo voluntario de todos ellos nos llenó de fuerza para concretar la reconstrucción y nos devuelve la convicción de que vamos en el camino correcto”, contó visiblemente emocionado Talavera, trabajador de la unidad sanitaria.

Las mimas chapas que se usaron para canalizar la represión, hoy son las paredes del nuevo taller

Las mimas chapas que se usaron para canalizar la represión, hoy son las paredes del nuevo taller

Ante la inminente amenaza de que la Metropolitana pueda avanzar sobre el predio del Borda, los trabajadores insisten: “Ellos podrán internarlo nuevamente, pero los pacientes que no pueden salir del hospital necesitan de esos talleres”. Detrás de esa convicción que conoce de lucha y resistencias, avanza el operativo reconstrucción.

Manos militantes

Cuando la Policía Metropolitana invadió las instalaciones del Borda, los pacientes y médicos planeaban la producción de mantas para acobijar a los chicos nacidos en la Maternidad Sardá, que por falta de frazadas son abrigados con trapos de piso. Pero a fuerza de represión, el proyecto se truncó.

"El amor vence al odio no es un simple slogan de campaña, es algo que hacemos carne todos los que militamos diariamente en pos de una realidad más justa”, cuenta a INFOnews Valentina Rimedio, militante de la de la Unidad Socialista para la Victoria –espacio que conduce Jorge Rivas- y una de las jóvenes voluntarias que se sumó al operativo recuperación.

El predio del Taller Protegido Nº 19

El predio del Taller Protegido Nº 19

Embarcada en semejante misión, además de compromiso, Valentina siente orgullo. “No nos quedamos con el dolor de ver al Borda destruido, con el vacío y la impotencia. Elegimos una vez más la construcción y pasamos a la acción. La consigna esconstruir donde hubo demolición y represión. Estoy orgullosa de ser parte de esta generación”, cuenta la joven militante.

Desde la Juventud Socialista para la Victoria, la situación del Borda fue seguida desde cerca. “Venimos apoyando la lucha de los trabajadores desde hace ya un año, a partir del día que la Metropolitana valló el Taller Protegido 19, y la empresa constructora amenazó con demolerlo”, recuerda Valentina, que tiempo después, aunque sin siquiera imaginarlo, se vio rescatando de los escombros ladrillos sanos para dar vida al taller demolido.

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