Una receta para las crisis petroleras

Una receta para las crisis petroleras

Con 40 años en el mercado local, una tornería neuquina amplió su oferta para enfrentar los vaivenes de la industria hidrocarburífera. Ahora buscan capitalizar la experiencia del boom de Vaca Muerta y tienen expectativas de una reactivación en el sector.

 

En 2012, cuando surgió lo de Vaca Muerta, llegamos a tener 120 empleados. Fueron tres buenos años de actividad, pero en 2015 comenzó a bajar y el año pasado fue muy malo. Hoy tenemos la mitad de personal y la facturación cayó un 60 por ciento”. Así resume la situación actual Hernán Bender, socio gerente de Tornería Industrial, empresa con casi 40 años de trayectoria en la región.

Bender dice estar acostumbrado a las periódicas crisis de la actividad petrolera. “En los 20 años que llevo en la empresa he visto y padecido muchas, pero por suerte no pasamos por ningún momento en el que estuviésemos al borde de la extinción. Creo que el secreto es saber cuándo replegarse y cuándo expandirse”, comentó.

Con 40 máquinas entre tornos tradicionales, de control numérico y centros mecanizados, Tornería Industrial logró posicionarse como una de las más importantes del sur del país, realizando trabajos no sólo para la Cuenca Neuquina sino también para Mendoza, Salta y Comodoro Rivadavia.

“Nos dedicamos a la reparación de todo tipo de piezas y a la creación de algunas nuevas como cuplos dentados, bridas, carretes y engranajes. Nuestra principal actividad es la reparación de equipos de perforación, terminación y pulling, por lo que cuando hay baja de equipos en los yacimientos lo sentimos mucho”, explicó.

En cuanto a las expectativas para el futuro de la actividad, comentó: “creo que tocamos fondo, y que lo que venga tendrá que ser necesariamente positivo. Algunos clientes me dicen que se están preparando para la reactivación, y eso marca una expectativa cierta porque reparar equipos implica una inversión importante. Hay otras empresas que no ponen un peso hasta tener un contrato firmado, pero creo que el que esté mejor preparado cuando se reactive va a sacar ventaja”.

Tornería Industrial trabajó siempre con empresas de servicios, pero en épocas de crisis buscan ampliar el horizonte. “Comenzamos a visitar a las operadoras para que conozcan nuestra oferta, ellos están buscando bajar costos y de esta manera se evitan un intermediario. Esto nos permitió obtener contratos con Pluspetrol, YPF y PAE”, detalló Bender.

Al trabajo de tornería se suman arenado, pintura, metalurgia, transporte, carga y descarga. “De esta manera una empresa se evita tener que ir a cuatro o cinco lugares para tener el trabajo completo”, indicó.

Otro aspecto que Bender considera fundamental para que una empresa pueda mantenerse en el tiempo más allá de las fluctuaciones de la actividad es la fidelidad del personal. “Los sueldos son similares a los que paga la industria petrolera pero el régimen es distinto, acá cada empleado duerme todos los días en su casa. Tenemos 14 torneros especializados, pero si falta alguno siempre puede venir alguien de otro sector porque los más antiguos lo capacitan”, explicó el socio gerente de la firma.

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