La reapertura del canje y los fondos buitre, en la agenda argentina del G20

La reapertura del canje y los fondos buitre, en la agenda argentina del G20
Ambos temas, junto con la implementación de reformas en el sistema financiero internacional, la lucha contra los paraísos fiscales y la creación de empleo serán algunos ejes que abordará Cristina en la cumbre.
La decisión argentina de reabrir el canje de deuda, la pelea con los fondos buitre, la necesidad de seguir adelante con la implementación de reformas en el sistema financiero internacional, la lucha contra los paraísos fiscales y la creación de empleo como herramienta central para enfrentar las crisis serán algunos de los ejes que abordará la presidenta Cristina Fernández de Kirchner durante la cumbre del Grupo de los 20 (G-20).

El encuentro se desarrollará entre el jueves y viernes próximo en San Petersburgo, Rusia, y contará con la presencia de los presidentes y jefes de Gobierno de las principales potencias del mundo.

La delegación que representará a la Argentina, encabezada por la Presidenta, estará integrada por el canciller Héctor Timerman, los ministros de Economía y de Trabajo, Hernán Lorenzino y Carlos Tomada, el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, y la embajadora argentina en Estados Unidos, Cecilia Nahón, quien se desempeña como sherpa (guía) de la jefa de Estado.

El encuentro se desarrollará entre el jueves y viernes próximo en San Petersburgo, y contará con la presencia de presidentes y jefes de Gobierno de las principales potencias Nahón ya se encuentra en San Petersburgo debido a que mañana participará con sus pares de las naciones miembro del G-20 de la discusión del documento final que los presidentes y jefes de Gobierno terminarán de definir entre el jueves y el viernes.

La reunión de los sherpas se extenderá hasta el jueves, hasta horas antes del mediodía de Rusia, cuando comenzará formalmente la Cumbre de Presidentes del G-20.

El documento final llevará por nombre el de "Plan de San Petersburgo" y hará eje en cuestiones referidas a regulaciones financieras de corto plazo y a medidas destinadas a oxigenar la economía mundial, según sostiene el plan de trabajo presentado por Rusia como país presidente del foro y organizador.

El jueves, minutos antes de que dé comienzo la cumbre, el presidente ruso, Vladimir Putin, anunciará de manera oficial que la próxima cumbre se realizará en Australia, en 2014, y que tras la finalización del encuentro la presidencia del grupo pasará a manos del primer ministro Kevin Rudd.

A pesar de que la agenda diseñada por Rusia para las discusiones del grupo tienen un sesgo eminentemente económico, este año la cumbre tendrá un alto voltaje político por la crisis de Siria y la decisión de EEUU de llevar adelante una acción militar en contra de ese país, entre otras cuestiones.

También el foco estará puesto en la tensión bilateral desatada entre EEUU y Rusia tras la decisión del gobierno ruso de concederle asilo a Edward Snowden, responsable de dar a conocer al mundo los programas de espionajes tecnológicos que lleva adelante el gobierno norteamericano.

Además de los países miembros del G-20, en la cumbre también estarán presentes los principales directivos del Banco Mundial, del Fondo Monetario Internacional FMI, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y de las Naciones Unidas (ONU).

A estos se sumarán, por invitación del país, los presidentes de Brunei, en representación de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático; Etiopía, por la Unión Africana; Kazajistán, en nombre de la Comunidad de Estados Independientes; Senegal, líder de la Nueva Alianza para el Desarrollo de Africa; Singapur, que preside el Comité de Finanzas del FMI; y Chile, como invitado especial.

Las deliberaciones de los presidentes tendrán lugar en el Palacio de Constantino, o Palacio de los Congresos, cuya construcción fue ordenada por Pedro El Grande, en 1720, y que está ubicado a unos 20 kilómetros del centro de San Petersburgo.

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