Realizarán pericias a los teléfonos de los sospechosos del homicidio de Giselle

Realizarán pericias a los teléfonos de los sospechosos del homicidio de Giselle
Avanza la causa que investiga el homicidio de Giselle Monje. Los sospechosos continúan detenidos y la Justicia pidió pruebas periciales a sus teléfonos. Existe la posibilidad de que se acceda a los mensajes de texto intercambiados entre Giselle y sus presuntos agresores.

La Justicia y la Policía de Río Negro continúan con la investigación para esclarecer el homicidio de la joven Giselle Monje, por el que permanecen detenidos dos hombres.

Este miércoles el gobierno anunció que ofrecerá recompensa a quien pueda aportar datos de interés para la causa. El pedido había sido realizado por el Fiscal Eduardo Fernández, a cargo de la investigación judicial, apenas apareció el cuerpo de la mujer en un descampado en el ingreso del barrio Vivero, los primeros días de diciembre de 2013.

En diálogo con B2000, Fernández manifestó que, si bien el pedido fue realizado hace más de un mes atrás, resulta de interés abrir esa posibilidad para que se sumen pruebas al expediente. Según aclaró, se trata de una opción para sumar a toda la producción de pruebas que se realizó hasta el momento.

"Es oportuno que se concrete ese pedido teniendo en cuenta que alguien pudiera tener algún dato más, más allá de la prueba que se recolectó", indicó y agregó que "la policía y la fiscalía siguen trabajando y se siguen reuniendo pruebas". "Hay mucha prueba científico técnica que se sigue produciendo. Y otra que hay que esperar en respeto a los plazos legales que no se pueden obviar", añadió respecto al trabajo realizado durante los allanamientos a las viviendas de los sospechosos Eduardo Fernández (homónimo del fiscal) y Roberto Bordón.

Antes de que los especialistas de Gendarmería Nacional avancen en el análisis científico, se debe notificar a la defensa a cargo del abogado Juan Pablo Laurence, quien tendrá la posibilidad de pedir un Perito de Parte y Puntos de Prueba, entre otros derechos de los acusados.

Hasta el momento, la prueba colectada es científico-técnica y testimonial. Hubo cruces telefónicos que señalaron que hubo comunicación muy fluida entre los detenidos y la joven de 21 años, con unas 40 llamadas en un lapso de 15 días que se cortaron abruptamente en el momento estimado de su fallecimiento. Además, un testigo afirma haber visto a Giselle a unos 60 o 70 metros de la vivienda de Fernández, el 8 de diciembre, tres días antes de la aparición de su cuerpo sin vida.

Por otra parte, según informó el fiscal, queda pendiente de producirse prueba pericial sobre los teléfonos secuestrados en los allanamientos a las viviendas de Fernández y Bordón, oportunidad en la que quedaron detenidos.

Esta información podría resultar crucial porque, si bien el teléfono de la joven no fue encontrado, a través de estos teléfonos podría recuperarse el contenido de los mensajes de textos intercambiados en el período investigado.

También se esperan los resultados de las muestras de ADN que fueron tomadas del cuerpo de la joven, para constatar si coinciden con los de los hombres.

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