En un decreto firmado además por el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, se dispuso otorgarle un nuevo mandato hasta fines de 2016, más allá del actual período de la Presidenta.

Echegaray asumió al frente de la AFIP el 30 de diciembre de 2008 al reemplazar a Claudio Moroni, tras desempeñarse como jefe de la extinta Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca).

Previamente manejó la Aduana, uno de los tres brazos del organismo junto con la DGI y el área de la seguridad social. Con 46 años, es uno de los funcionarios más relevantes del sector económico oficial, pese a la relación distante que mantiene con el otro hombre fuerte del área, el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

Aunque la renovación de su mandato se mantuvo en secreto, él se sentía confiado en seguir tras haberse reunido dos veces esta semana con la Presidenta para dialogar sobre la marcha de la recaudación tributaria de este mes y sobre el demorado Plan Antievasión III.

La recaudación, que desde enero hasta noviembre último alcanzó los $ 617.578 millones, superará la meta fijada en el presupuesto 2012, ya que sólo se necesitan $ 50.000 millones para alcanzar este objetivo.

La falta de ajuste por inflación y la decisión del Gobierno de obviar este año la suba del mínimo no imponible de ganancias contribuyeron a lograr un buen nivel de ingresos, pese al estancamiento del PBI.

Para mantener esta tendencia, la AFIP endureció esta semana los controles de fiscalización en Ganancias, al establecer que las deducciones al impuesto -que en algunos casos no se ajustan desde fines de 2001-deberán informarse en forma electrónica para los salarios desde los $ 250.000 anuales brutos.

También habrá que hacerlo si se pretende lograr la devolución del recargo del 15% para los gastos en el exterior con tarjetas de crédito.

En cuanto al plan antievasión III, cuyo borrador salió de la AFIP y se discute en el Ministerio de Economía, intentará ampliar la presión impositiva sobre los sectores financiero e inmobiliario, pese a que este último registró una fuerte caída este año por el cepo al dólar aplicado fervientemente por el organismo.

Echegaray está siendo investigado en la causa Ciccone, por el otorgamiento de una moratoria excepcional a esa imprenta cuyos dueños estarían ligados al vicepresidente Amado Boudou. En cambio, por ahora logró ser sobreseído en la causa por presuntas irregularidades en la Oncca, aunque la fiscalía pidió revocar esta situación.

Este mes, inició demandas civiles contra los periodistas Luis Majul y Matías Longoni, criticadas por entidades profesionales y hasta por el CELS, ligado al oficialismo..