Sin embargo, el técnico tomó una medida que no será muy aceptada por los hinchas de Avellaneda: el riojano inhibió a Independiente por una deuda de casi 600.000 pesos de la época en que dirigía al Diablo.

La demanda se debe a los pagos de sueldos que el club todavía le adeuda a él y a su cuerpo técnico, incluido Sebastián Rambert, quien ya no forma parte de su grupo de trabajo.

El Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Comercial N° 10 – Secretaría N° 19 dio a conocer el siguiente comunicado: “Mándase seguir la ejecución contra CLUB ATLÉTICO INDEPENDIENTE hasta hacerse íntegro pago a los acreedores RAMÓN ANGEL DÍAZ, SEBASTIÁN PASCUAL RAMBERT, RAMÓN EMILIANO DÍAZ, RAFAEL ENRIQUE GIULIETTI, JORGE ESTEBAN PIDAL y EZEQUIEL EDUARDO DOMINGUEZ de la suma de PESOS QUINIENTOS NOVENTA Y UN MIL OCHENTA Y SEIS ($ 591.086) con más sus intereses y costas”.