También reconoció el acompañamiento de la secretaría de Derechos Humanos, de Délfor Brizuela, sacerdotes que lo conocieron y compartieron con él; de Domingo Bordón y de los miembros de la asociación y demás personas de La Rioja que siempre estuvieron a su lado, apoyándola y respaldándola.

 “Esto es importante por mis hijas, que tengan conocimiento quién fue su padre y por qué lo mataron” dijo doña Coca e inmediatamente explicó “Wenceslao significó mucho pero no ha sido tomado en cuenta ni recordado por los jóvenes. Él estaba formando una cooperativa de trabajo y estaba al frente de la organización de la misma. Fue castigado él, siendo que ahora hay cooperativas por todos lados”.

 Entre lágrimas, dijo que “yo perdí a mi marido y el padre de mis hijas y esas son secuelas que quedan. Fue muy desagradable y triste para mis hijas que eran chicas, pero gracias a Dios ahora son grandes y están tomando conciencia por todo lo que se está haciendo, de qué fue lo que pasó en aquella época. Ellas tienen que saber quién fue el padre y por qué le dieron tan horrible muerte que no se lo merecía porque llegaron encapuchados  y un montón de hombres para matar a una sola persona, y no teníamos ni un palo para defendernos”.

 Por último, manifestó que quiere que la causa judicial avance para que se sepa lo que pasó y quienes mataron a Wenceslao Pedernera. “Estoy apoyada por gente que no me abandonó nunca, por personas que lo conocieron y sacerdotes que compartieron con él”.