Cuando el reloj marcó las siete de la mañana en la localidad de Canberra, Australia, una larga fila de venezolanos esperaba para emitir su voto. “Es un honor ser la primera en votar en el mundo”, aseguró Rina Rivas ante las cámaras.

Los inmigrantes destacaron que algunos de ellos habían recorrido casi 4 mil kilómetros para llegar hasta las urnas, lo que representó una inversión de, al menos, US$ 300 dólares.

A su vez, en la localidad de Kuala Lampur, Malasia, 112 venezolanos fueron hasta la embajada para votar. "Si yo viajé 12 horas y media desde Nueva Zelanda, ustedes que tienen el centro cerca, en Venezuela, tienen que cumplir con el país y votar", dijo una de las electoras.

“Han llegado venezolanos hasta desde Kazajistán”, indicaron.