Sostuvo que esa afirmación fue reconocida por el representante de la Autoridad Regulatoria Nuclear de Argentina Hugo Edgardo Vicens quien en su exposición dijo que la planta de la empresa ubicada en Córdoba deja toneladas de residuos radioactivos. Como norma en el derecho, a reconocimiento de parte relevo de pruebas.

El ingeniero Vicens dejó en claro que la máxima entidad nacional encargada de velar por la seguridad de todo el circuito de generación de energía atómica en el país aún no encuentra una solución a este problema, precisó el edil. 

Afirmó que según Vicens en Córdoba, donde se emplaza actualmente Dioxitek se han enterrado toneladas de desechos radioactivos en el famoso chichón del cual hemos venido advirtiendo desde la oposición al señalar la contaminación que produce esta planta con pésimos antecedentes, manifestó. 

Si aún no se sabe qué es lo que va a hacer la ANR con los desperdicios con alto contenido de radioactividad entonces con qué autoridad pueden decir que en Formosa no pasará lo mismo se preguntó Arce. 

El concejal manifestó que participó de la audiencia pública con el objetivo de conocer el estudio de impacto ambiental, es claro que el oficialismo hace propaganda respecto a los supuestos beneficios que traería a Formosa la instalación de esta planta procesadora de combustible para las centrales nucleares. Pero nos encontramos con un estudio que representa una verdadera burla. No tiene ningún sustento factico ni técnico que lo avale. Está lleno de contradicciones y hasta de gruesas omisiones, enfatizó. 

A criterio de Arce una de las cuestiones importantes que se dejó de lado fue la afectación antrópica, es decir, de las personas. Sobre todo cuando a unos cinco kilómetros de distancia del punto elegido para emplazar Dioxitek está ubicada la comunidad toba en el barrio Namqom. Esta comunidad no ha sido consultada y menos aún tenida en cuenta respecto a posibles eventos contaminantes. 

Del estudio se desprende que la empresa cada quince días hará análisis a quienes trabajen en ella, con lo cual está reconociendo el riesgo que existe. Pero nada dice de las poblaciones como la de pueblos originarios ubicada a pocos kilómetros, mencionó. 

Además manifestó Arce que otra de las mentiras del oficialismo que ha quedado en evidencia fue manifestada por el senador del Paraguay Fernando Silva Facetti, al señalar que el gobierno de su país ha realizado reiterados pedidos de informes a la Cancillería argentina pero aún hoy no obtienen respuestas sobre este proyecto. Lo mismo ocurre con la responsable de la máxima autoridad de energía atómica del país que nunca contesto un pedido de informes requerido por el Senador Naidenoff. Se ha montado toda una cortina de humo con una audiencia que solamente ha servido para ratificar nuestra posición en contra de la instalación de Dioxitek. 

Hasta los técnicos y oradores que el oficialismo trajo reconocieron los riesgos que presenta la empresa. Esto nos habilitan a seguir pensando que existe algo más que el interés por el desarrollo de Formosa en esta iniciativa del gobierno provincial, concluyó.