Los gobernadores se sorprendieron el viernes con la decisión de Alberto Fernández de delegarles la definición de qué actividades o regiones podrían ser exceptuadas de la cuarentena y hasta ahora no se atreven a hacer uso de esa facultad. 

 

Algunos evalúan autorizar algunos sectores de la economía castigados por la parálisis, pero ninguno por ahora van con pie de plomo, por temor a un rebote de contagios que los incinere políticamente.  El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, fue acaso el más audaz y anunció que definirá un esquema de aperturas parciales con intendentes y comerciantes locales.

Varios de los gobernadores interpretaron la movida de Alberto como una jugada para transferirles el riesgo y los eventuales costos de flexibilizar la cuarentena y por eso le respondieron ratificándola. "Hay una pulseada", graficó a LPO un operador de consulta diaria con varios de ellos.

Varios de los gobernadores interpretaron la movida de Alberto como una jugada para transferirles el riesgo y los eventuales costos de flexibilizar la cuarentena y por eso le respondieron ratificándola.

Axel Kicillof se reunió este domingo con intendentes del Conurbano y luego de escuchar su posición garantizó que "no habrá flexibilización de la cuarentena" en esa región porque se espera un pico de contagios para mayo, como reveló en exclusiva LPO. 

Alberto cede a los gobernadores la administración de la cuarentena y la extiende hasta el 26 de abril

"Alberto se enamoró de la jugada de la cuarentena porque le rinde políticamente, pero vemos que no tiene muy clara la estrategia de salida", agregó a LPO la fuente consultada.

Los gobernadores en la apertura de sesiones de Alberto Fernández. 

 

En su conferencia del viernes, Alberto abrió la posibilidad de que ciudades chicas puedan salir del encierro si no registraran contagios, pero hasta ahora ningún intendente se animó a levantar la cuarentena de manera formal ante el riesgo político de luego se produzca un contagio y deba enfrentar un alto costo político. Cuando en rigor, en varias de las localidades sin casos el encierro se cumple de manera muy laxa, sin enfrentar el riesgo político de declarar el fin de la cuarentena.

Este sábado, algunos gobernadores se anticiparon a los reclamos para avisar que no dejará salir a la gente de sus casas, como los de Tucumán, Santiago del Estero, La Pampa y Catamarca, pese a que en esta última provincia no hay casos registrados.

El gobernador de Neuquén evalúa la que sería la jugada más fuerte de flexibilización: habilitar la construcción privada.

Tampoco hay casos de Covid 19 en Chubut y el gobernador prepara una plataforma online para habilitar la atención por turnos en comercios y servicios.  Su colega de Neuquén, Omar Gutiérrez. ampliaría horarios de delivery y sumaría algunos rubros como telefonía móvil, pinturería, ferretería y analiza acaso la jugada de apertura más fuerte: habilitar la construcción privada. 

Gutiérrez estudia avanzar con esa decisión en un acuerdo con las empresas y el sindicato de la construcción, en base a un protocolo sanitario con turnos programados y respetando el distanciamiento laboral, explicaron a LPO fuentes de la provincia. Por su parte, el gobierno nacional ya habilitó la construcción para obra pública. 

Algunas provincias evalúan habilitar turnos médicos de especialidades no contempladas hasta ahora y en los grandes centros urbanos todo seguirá igual, por ahora, sin siquiera la autorización de hacer actividades físicas por número de documento, que Alberto anunció el viernes pero no sumó al decreto. Espera propuestas de los gobernadores. Pero no llegó ninguna.