La Provincia promulgó la Ley de Paridad de Género

La Provincia promulgó la Ley de Paridad de Género

El decreto fue publicado en el Boletín Oficial a más de 20 días de aprobada la norma en la Cámara de Diputados. Comenzará a regir en las elecciones de 2017 en todo el territorio bonarense. ¿Cómo repercutirá en el escenario político de la Legislatura?

Con fecha del 19 de octubre, la gobernadora María Eugenia Vidal oficializó la Ley de Paridad de Género, aprobada por la Cámara de Diputados el día 4 del corriente mes, que tiene por objetivo “incorporar la participación política equitativa entre géneros para todos los cargos públicos electivos de la provincia de Buenos Aires”.

De esta manera, el equilibrio en las listas legislativas comenzará a regir en las elecciones de 2017 en todo el territorio bonaerense. Las mismas deberán respetar, en todas las categorías (diputados, senadores, concejales y consejeros escolares) una “equivalencia del cincuenta por ciento (50%) del sexo femenino y otro cincuenta por ciento (50%) del sexo masculino”, y deberá cumplir con el mecanismo de alternancia y secuencialidad entre sexos por binomios (mujer-hombre u hombre-mujer).

De acuerdo a la flamante legislación, las vacancias de las listas de cuerpos colegiados –ya sea por renuncia, fallecimiento o incapacidad- se cubrirán siguiendo el orden de postulación de los candidatos, respetando la paridad para candidaturas del género femenino y del género masculino y el orden de inclusión.

Para despejar cualquier duda, la norma establece que “el género del candidato estará determinado por su Documento Nacional de Identidad (DNI), independientemente de su sexo biológico”.

El Frente Renovador fue uno de los espacios que más fuertemente presionaron para que la ley de paridad de género sea una realidad. Si bien la autoría del proyecto lleva la firma del senador Sebastián Galmarini, lo cierto es que su hermana Malena fue el cerebro de la iniciativa. Con recorridas y numerosas apariciones en los medios de comunicación, logró instalar el tema en la agenda y, también, que sea una prioridad para la gobernadora María Eugenia Vidal y, por ende, para Cambiemos.

Pero lo cierto es que dentro del seno del massismo, el reparto de las listas con 50% de varones y 50% de mujeres puede resultar un dolor de cabeza cuando llegue el momento del armado de listas. Un dolor de cabeza que seguro afectará más a los hombres, si se tiene en cuenta la cantidad que terminarán su mandato en 2017.

El próximo año serán 11 los diputados del Frente Renovador que deberán renovar sus bancas. De ese total, nueve son hombres y dos mujeres. Ante un escenario similar al de 2013, cuando el massismo ingresó 16 diputados, quedarían ocho lugares para cada uno de los géneros. Las damas sumarían seis respecto de las dos que dejarán la banca; mientras que para el sexo masculino se restaría en tres.

En rigor, lo que enfrentaría Massa sería un gran problema interno, puesto que quienes queden afuera de las nóminas, difícilmente puedan ser contenidos por un espacio que no cuenta con lugares ejecutivos con los cuales compensar; chance que sí tiene el oficialismo.

Desde el ala femenina del Frente Renovador aseguran que la conformación de las listas no será un problema en el futuro cercano. “Nosotros venimos trabajando con este tema hace más de un año, y los hombres del partido lo tomaron de una manera muy generosa. Han salido a ponerle voz a la iniciativa y han levantado la bandera junto a nosotras”, afirmó en diálogo con La Tecla la senadora provincial Micaela Ferraro.

Con relación a la necesidad de sumar más candidatas de cara a los comicios de 2017, Ferraro señaló que “en todos los espacios hay más mujeres que hombres, sólo que no llegan a estar en las listas. Esta iniciativa lo va a hacer más visible”. Y añadió: “Las que sostienen las grandes patriadas son las mujeres, con la paridad vamos a reacomodar las cosas para que, quienes tengan la oportunidad, estén en espacios de poder y decisión”.

Puertas afuera del Frente Renovador, ¿qué sucede en los demás partidos? Uno de los mayores obstáculos, más allá de la siempre peleada composición primaria de las listas, se presentará en aquellos espacios donde haya internas y luego se deban intercalar las nóminas.

Por caso, y suponiendo que en Cambiemos prospere la postura de Ricardo Alfonsín de que cada espacio presente sus candidatos en las PASO, la conformación final de los lugares será una de las principales dificultades. Es que, además de los resultados obtenidos que determinarán los lugares que ocupe cada candidato en la nómina (con el uso del sistema D’Hont), se deberá respetar la alternancia de género. Por ello, quien encabece una de las nóminas se enfrentará a la posibilidad de quedar muy abajo en la boleta y, con ello, fuera de la Legislatura.

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