El Senado bonaerense aprobó el Proyecto de ley impulsado por el oficialismo que prevé hasta 60 días de cárcel y multas de hasta $ 30.000 para aquellos familiares de estudiantes primarios y secundarios que agregan a docentes. La medida incluye a aquel que en representación de un alumno y dentro del establecimiento educativo "hostigue, maltrate, menosprecie o perturbe emocional e intelectualmente a un trabajador de la educación, sea docente o no”.

Ayer pasó por despacho de la Comisión de Educación que preside Juan Pablo Allan y hoy se aprobó en el Senado. Al respecto, el mismo Allan señaló que el Proyecto "es para cuidar a los docentes de la violencia de los padres de sus estudiantes", y aseguró que “fue debidamente debatido” y que “nos interesa la opinión de los gremios pero no obstante de ello, la política la define el poder ejecutivo”. A su vez señaló que “esa es una decisión de este gobierno y con este proyecto buscamos abordar una problemática nueva pero que va creciendo”.

Por su parte, desde el Frente Para la Victoria, la senadora Cecilia Lorena Comerio manifestó que la posición del bloque es en contra porque “no es correcto que se le de tratamiento express a un proyecto que aborda una problemática tan importante”. Además criticó que falten voces "como la de la comunidad educativa para resolver el problema” y explicó que “no creemos que la via judicial y administrativa sean las formas”.

Su par del Partido Justicialista Daniel Barrera, también se manifestó en contra y remarcó que “si nosotros imponemos una sanción económica dañando la economía de esa familia, o si nosotros ponemos preso por 30 días a un integrante de la familia lo que hacemos es sembrarle una situación mucho más traumática de la que tiene y eso no soluciona el problema”. Por eso propuso “toda la colaboración necesaria para erradicar la violencia en los establecimientos educativos” y dijo que “para eso necesitamos un trabajo mucho más integral porque primero hay que erradicar la violencia en la sociedad”.

Patricio García del Bloque Peronista le pidió a la Gobernadora Vidal que lancen una Reforma más seria y general: “queremos aportar este granito de arena”. Luego le habló a los legisladores de Vidal y dijo que “me gustaría que la misma energía y preocupación la hubieran demostrado para liderar los amparos contra los tarifazos”.

La postura del Frente Renovador fue intermedia. El Presidente del Bloque, Jorge D'Onofrio opinó que se trata de un “granito de arena dentro de la problemática que hay que resolver” y se mostró a favor de la propuesta pero señaló que tratar solamente la violencia hacia los educadores “es quedarnos a mitad de camino con el resto de la violencia que se registra en los colegios, contra los alumnos y contra el personal de maestranza”.

Además se quejó de las formas en las que se pidió sacar este proyecto y les pidió al oficialismo que no se queje por los modos del anterior gobierno, "que sacaba las cosas cuando quería, porque Cambiemos termina haciendo lo mismo".