Los taxistas volvieron a marchar ayer contra la llegada de Uber . Las protestas más importantes ocurrieron al pie del Obelisco y en la entrada del nuevo edificio del gobierno porteño, en Parque Patricios, donde entregaron un petitorio. El consecuente caos de tránsito provocó demoras para circular y el malestar de los automovilistas. Mientras tanto, y pese a la orden judicial para bloquear la plataforma, la aplicación todavía sigue en funcionamiento, aunque los pasajeros que contrataron el servicio empezaron a sufrir problemas para pagar con tarjeta de crédito.

A los dos cortes más organizados se sumaron otros piquetes espontáneos en Callao al 100, en la zona de Congreso, y en Esmeralda al 1200, en Recoleta.

Integrantes de la Asociación Civil de Taxistas de la Capital se concentraron en Jujuy y Brasil y desde allí marcharon en caravana hasta la sede del gobierno porteño, en Uspallata al 3100. Los taxistas consideran a Uber competencia desleal y una amenaza para sus fuentes de trabajo. La plataforma permite conectar a través del teléfono celular a pasajeros con conductores particulares que realizan los traslados a precios más económicos, pero no cuentan, por ejemplo, con licencia profesional de conducir ni seguros específicos.

"No queremos perjudicar a la gente. Pero alguien tiene que frenar a Uber, que opera ilegalmente en contra de la normativa vigentes", opinó Alberto Rodríguez, de la asociación.

En tanto, José Ibarra, secretario general del Sindicato de Conductores de Taxis, se mostró conforme con la evolución de las diferentes demandas realizadas contra la empresa estadounidense, que presta servicios en más de 400 ciudades de todo el mundo, y en muchas de ellas ha encontrado la oposición de los taxistas formalizados.

Ayer, el juez en lo contencioso administrativo de La Plata Francisco Terrier también inhabilitó cautelarmente a Uber para trabajar en la capital provincial, al hacer lugar a un pedido sectorial. Ordenó a las empresas Uber Technologies Inc., Uber BV, Uber Argentina "o cualquier otro satélite" de ésta abstenerse o cesar en el desarrollo de la actividad, en el ámbito del partido de La Plata.

Previamente, la justicia porteña había ordenado al gobierno de la ciudad que arbitrara todas las medidas necesarias para suspender el funcionamiento de Uber. La Secretaría de Transporte local comenzó a acarrear autos al servicio de Uber y multó a los choferes, y desde el Ministerio Público Fiscal allanaron domicilios vinculados a la firma. Además, un fiscal porteño solicitó al Ente Nacional de Comunicaciones que bloqueara la aplicación, pedido que se trasladó a los prestadores de Internet y de telefonía móvil.

Balance

Pero la plataforma sigue accesible. Y más: como contrapartida de la ofensiva judicial y gubernamental, Uber comenzó a ofrecer viajes sin cargo para los pasajeros del área metropolitana de Buenos Aires, promoción que culmina hoy. Si bien los traslados se siguen contratando, hubo un reclamo generalizado de los usuarios del sistema por las demoras y la falta de disponibilidad de vehículos, probablemente relacionadas con la alta demanda por la gratuidad.

Otra queja reiterada giró en torno a la dificultad para abonar con tarjeta de crédito, tal como lo prevé la aplicación. Al descargarla y registrarse, el usuario deja grabado un número de tarjeta del que luego se debita el costo de cada viaje.

"Varios usuarios nos han comentado que sus tarjetas Visa han sido rechazadas. Quienes han utilizado American Express y Mastercard no han tenido ningún inconveniente, mientras que otros pasajeros se han comunicado de forma telefónica con Visa Argentina para poder utilizar Uber", dijo la compañía estadounidense.

Desde Prisma Medios de Pago, la compañía que tiene a cargo Visa, explicaron que Uber no está registrada como comercio en la Argentina y que, por este motivo, la operación suele fracasar. David Galavotti es uno de los usuarios afectados. Dijo que se puso en contacto con Visa Argentina y le respondieron que Uber no está adherida a sus servicios de pagos.

De cualquier manera, en la madrugada del lunes la compañía transfirió a los choferes asociados el dinero de los viajes realizados hasta entonces. Según Uber, ya suman 30.000 los conductores suscriptos y en una semana la aplicación móvil tuvo 200.000 descargas.