La Justicia entrerriana prohibió la aplicación de agroquímicos en las islas del río Paraná al rechazar el planteo de un pool de siembra que explota 20 mil hectáreas frente a las costas de Fighiera, Arroyo Seco y Villa Constitución. El fallo de segunda instancia sienta un precedente en cuanto a la regulación de la explotación agropecuaria de esas tierras de jurisdicción de la Municipalidad de Victoria, pero mucho más cercanas a la costa y a las poblaciones santafesinas.
La firma contrariada por el dictamen judicial es Bema Agri BV, un pool de siembra y cría de ganado sostenido por capitales holandeses y chilenos. Ya en 2008 encaró un conflicto judicial con el municipio victoriense luego de que le descubrieran la remoción de tierras y construcción de terraplenes a lo largo de 19 kilómetros de extensión para cerrar vasto lote disponible para el cultivo de soja. La puja recorrió un largo camino hasta este fallo de la Cámara en lo Contencioso Administrativo de Paraná, integrada por Gisela Schumacher, Marcelo Baridón y Hugo González Elías.
PUBLICIDAD
La sentencia valoró que la zona donde
está la Isla Irupé fue declarado sitio
Ramsar por la Convención Sobre Humedales.
La empresa demandó a la Municipalidad victoriense por haberle ordenado paralizar las obras hidráulicas que había encarado sin permiso en la isla Irupé. El tribunal aceptó que en la zona se pueda desarrollar actividad ganadera, pero prohibió agricultura intensiva a través del uso de agroquímicos y plaguicidas. Y ratificó la pertenencia del Delta del Paraná a la lista de sitios Ramsar, preservados con carácter internacional.
Los jueces entendieron que el municipio entrerriano es competente para reglar el derecho de propiedad sobre la tierra de su distrito. Para apoyar este criterio, el tribunal le otorgó al Ejecutivo la facultad para imponer restricciones en virtud del interés público y ambiental.
Los camaristas reafirmaron que la isla Irupé -situada frente a la localidad santafesina de Fighiera, 20 kilómetros al sur de Rosario- forma parte del Delta, y allí el corpus normativo de Victoria no admite destino de agricultura y expendio de combustible. En cambio, sí habilita la explotación ganadera y apícola. "La presencia de ganado en el suelo insular no elimina la flora autóctona y en algunos casos la favorece, siendo su impacto negativo tolerable por el ambiente en la medida en que se gradúe y controle la intensidad de la presencia ovina", mientras que se prohíbe la explotación agrícola intensiva que conlleva el uso de agroquímicos o plaguicidas", incompatibles con la conservación de la fauna y flora del humedal, señalaron los jueces en su veredicto.
La sentencia valoró que el sector en el que se encuentra la Isla Irupé fue declarado sitio Ramsar por la autoridad de aplicación de la Convención Sobre Humedales, a pedido de la República Argentina, por lo cual las decisiones de las estatales, incluidas las judiciales, que afecten dicho espacio podrían acarrear responsabilidad frente a la comunidad internacional.
El tribunal de Alzada remitió copia del fallo a la Fiscalía de Victoria, ante la posibilidad de que, entonces, la empresa Bema Agri BV haya incurrido en algún delito de índole ambiental.
Comentá la nota